Itinerario político/Ricardo Alemán
¡SE LOS DIJE, SON UN CIRCO LAS MAÑANERAS DE AMLO!
Apenas el pasado 15 de abril aquí dijimos que las mañaneras de López Obrador son un grosero montaje.
Dijimos que “para muchos”, la esgrima entre Jorge Ramos y el presidente Obrador había sido el mejor ejemplo de la batalla entre un buen periodista –independiente, audaz, crítico y bien informado--, y un presidente en total decadencia, sin más argumentos que el trillado emblema del autoritarismo; “tengo otros datos”.
También dijimos que para otros, se trató de una paliza del periodista avecindado en Miami, que lo mismo pelea con López Obrador que con presidentes como Trump y dictadores como Nicolás Maduro. Por eso, muchos mexicanos llevaron a Jorge Ramos a la calidad “de Héroe”, por apalear a un atolondrado López Obrador.
Sin embargo, también dijimos que existe una minoría --entre la que se encuentra el autor de este espacio--, que vemos en las mañaneras un triste espectáculo de circo, pactado entre periodistas como Jorge Ramos y torpes operadores del gobierno de Obrador quienes de inmediato debieron haber sido echados de sus puestos. ¿Por qué?
Porque sin necesidad expusieron al presidente mexicano al peor de los ridículos, en cadena nacional, cuando apenas lleva cuatro meses de gestión.
Y, al final, expusimos las razones y las pruebas de que el choque entre Obrador y Jorge Ramos no fue másque un circo; pruebas que hoy reiteramos.
1.- Una premisa central de la comunicación es que no hay periodismo cuando el periodista es la noticia. Y la noticia de la escaramuza entre Obrador y Ramos, no fue lo que dijo el presidente sino lo que dijo el periodista
2.- En rigor, vimos al presidente de siempre y al periodista de todo el tiempo. La diferencia y el contraste, en todo caso, fue el ridículo que todos los días hacen los periodistas mexicanos; timoratos, temerosos y sin talento.
3.- Además, no debemos olvidar que Jorge Ramos es un periodista “de casa”; de los que llamaron a votar por AMLO y se prestaron a crear la especie de que Peña Nieto era el peor presidente y Obrador era el mejor candidato.
4.- Para los que no saben, Jorge Ramos pacta entrevistas y el respectivo cuestionario. Luego, sobre la marcha, deja el guion y hace caer al entrevistado. Eso pasó con el dictador Maduro quien, por lo mismo, abandonó la entrevista.
5.- Y si dudan que Jorge Ramos es o era un periodista “de casa” para AMLO, vale recordar que el presidente nunca lo metió al saco de “la prensa fifí”, como moteja a sus críticos.
6.- También debemos recordar que Jorge Ramos es empleado de Univisión, filial de Televisa en Estados Unidos. Y nadie debe olvidar que Televisa es el principal aliado del gobierno de AMLO y que recientemente, en secreto, se reunieron el presidente Obrador y Jared Kushner –yerno de Trump--, en la casa de Bernardo Gómez, el número dos de Televisa.
7.- Y aquí es donde aparece la prueba contundente de que fue un circo la participación de Ramos en la mañanera de AMLO; circo que se salió de control para el gobierno mexicano cuando el presidente fue incapaz de sumar y restar.
8.- Y es que la pregunta clave para un periodista como Jorge Ramos, no era lo que todos conocemos –el sexenio más violento--, sino que “la pregunta” era sobre el pacto secreto entre AMLO y Trump en la casa del 2 de Televisa.
9.- ¿Por qué el audaz, crítico, independiente y bien informado, Jorge Ramos, no hizo la pregunta clave? ¿No es de risa loca que el periodista del momento haya olvidado la pregunta más importante para los gobiernos de México y Estados Unidos?
10.- Que nadie se equivoque, el choque entre Ramos y Obrador no fue una confrontación real entre un periodista crítico y un aprendiz de dictador. En realidad fue un circo en donde el maromero cayó al vacío sin red de protección.
Por lo anterior, ese 15 de abril preguntamos: ¿Hasta cuándo la torpeza de los operadores presidenciales seguirá exponiendo al presidente al escándalo público? ¿Hasta cuándo el engaño de periodistas a modo?
¿Y, qué creen? Que el jueves 9 de mayo, Brozo confirmó el engaño y también fue apaleado. Por eso volvemos a preguntar: ¿hasta cuando?
Al tiempo.