Hablando en serio/Santiago Heyser Beltrán
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“Deshojando a Margarita”
Uruapan, Michoacán, 20 de mayo del 2017
Conocí a Margarita Zavala en Morelia, su imagen de Señora me cautivó, después seguí su discreta trayectoria como primera dama y la valoré como persona.
Cuando por primera vez escuché de su intención de trabajar para México, consciente de su falta de oficio, de su inexperiencia como candidata y de sus desconocimiento de la responsabilidad de gobernar ¡Me pareció bien!... ¡Qué mejor en estas horas de turbulencia nacional, que una persona decente al frente del País!, México necesitaba, necesita, un cambio de rumbo en la política corrupta que genera gobernantes corruptos a partir de una partidocracia corrupta que se nutre a si misma desde el Congreso que hace leyes “ad hoc”, para que los partidos tengan el control de presupuestos y candidaturas electorales que “per se” evitan que lleguen los mejores mexicanos, salvo honrosas excepciones, a puestos de representación y gobierno. Margarita parecía una excepción, con solo un detalle en contra, el falso argumento de que si el PAN no la hace candidata competirá como independiente. Iniciar una propuesta de gobierno con esa balandronada la exhibía ¡Pero en fin!, nadie es perfecto y pensé que siendo inteligente, sabría rodearse de personas probas, con capacidad y experiencia como para hacer un gobierno excepcional en beneficio de México.
¡No!, fíjense que inicialmente no considere a Felipe un negativo por dos razones: 1.- Por respeto y correspondencia: al igual que Margarita como primera dama fue discreta, Felipe debía hacerse a un lado para que ella brillara con luz propia, y 2.- La carga negativa de un Presidente que en adición a gobernar con las patas y en función de intereses ajenos a México, llegó a la presidencia de forma fraudulenta de acuerdo a los estándares éticos del PAN, ambos elementos concurrían en que de verdad es una idiotez cimentar la candidatura de Margarita en el activismo idiota de Felipe, en mi opinión un hombre soberbio y corrupto… ¡Me equivoqué!, no solo Felipe se metió de lleno a promover a la esposa (con su anuencia), mandando una señal clara de que en caso de ganar Margarita, Él sería el poder tras el trono, sino que en su pleito callejero, cual es su estilo, enfrento no solo a la oposición sino a las mismas estructuras del partido en detrimento de la imagen de Margarita y de un proyecto, que sin Felipe, pudo ser bueno para México.
La primera señal de alerta la recibí cuando Margarita acompañó a Miguel Ángel Yunes en un acto de campaña a la gubernatura en Veracruz… ¿Qué haces, mujer?, pensé para mis adentros, Yunes, converso priista, es el prototipo, en mi opinión, del político corrupto, vividor y oportunista que sobrevive en el sistema en base al modelo de colusión corporativa que tienen los partidos, cito: hoy me apoyas tu, mañana te apoyo yo, si me conviene te traiciono y si llegamos a extremos, cambio de partido; lección que vimos con Diódoro Carrasco, con Javier Lozano, con Demetrio Sodi y con el ínclito Miguel Ángel Yunes entre otros, que a conveniencia, haciendo a un lado convicciones, ideologías y valores, migraron del PRI al PAN, como la bola de sátrapas convenencieros que han migrado del PRI y del PRD a Morena. En el camino quedó el cadáver de la otrora mentora de Yunes, la maestra Gordillo ¡Sí!, la que negoció con Felipe “candidato”, instituciones de la república (ISSSTE, LOTANAL y la Subsecretaría de Educación Básica) que no le pertenecían, para sumar entre un 2 o 3% de votos de maestros y gobernadores priistas afines a la maestra, para en contra de toda ética panista, ganar la elección del 2006 por medio punto porcentual, que lo llevó a la presidencia. Cosa curiosa, con el aplauso del panismo nacional que olvidó por un momento (por conveniencia y cómoda ceguera) que un triunfo sustentado en acuerdos tramposos, no vale y es contrario a los valores éticos y morales del partido.
Hoy tengo certeza, no de señales de incongruencia de Margarita que me pongan a dudar sobre el tipo de gobierno que haría; hoy tengo la certeza de que no podría gobernar en función del interés nacional, porque la vi felicitando a Yunes por: “proporcionar información que condujo a la captura de Javier Duarte” ¡Ajá” y por su proclividad a buscar el aval de los gringos (aunque le falló gacho con Hillary a la que de forma incorrecta mostró su apoyo) no veo como Margarita pueda llevar a la justicia a corruptos, como en mi opinión es Miguel Ángel Yunes y recuperar para el erario lo robado, tampoco veo como esperar un gobierno honesto, cuando de forma oportunista se suma a la alianza establecida por el gringuito Rich Anaya (Presidente del PAN) y la nueva rica que compra departamentos en USA, Alejandra Barrales (Presidenta del PRD)... Que Margarita apoye esa propuesta de alianza contra natura a los valores fundacionales del PAN, a mis ojos la descalifica, no solo por su inexperiencia como política y gobernante, sino por su experiencia de cómo hacer alianzas contra la filosofía panista, con tal de ganar ¡Haiga sido como haiga sido!, aprendida del peloncito chaparrito de lentes.
Cuatro lastres tiene Margarita que a mis ojos la descalifican para ser presidente de México, su relación con Yunes y otras tepocatas, su proclividad a hacer alianza con la parte corrupta del PRD con tal de ganar, el marido protagonista que quiere perpetuarse en el poder usando a su mujer y su conveniente miopía para no ver mal lo que está mal,… cuando le conviene. Lastres permitidos y avalados por la Sra. Calderón… ¡Lástima Margarita!… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser Beltrán
Escritor y soñador