Hablando en serio
El partido Acción Nacional; ¿cuál partido?
El PAN tiene de tres sopas: 1.- Despertar hacia la congruencia, 2.- Perderse en la intrascendencia con dirigentes corruptos, como el PRI y/o 3.- Desaparecer como el PRD.
¿Despertar?, no lo hizo en su elección interna; ¿lo hará antes de que su desaparición sea irreversible?, no lo sé, no parece.
¡No!, no espero que la cúpula panista me dé las gracias por abrirles los ojos, aunque deberían, ya que van camino al despeñadero, pero sería como esperar peras del Olmo, ¡no!, tampoco espero que la militancia me agradezca, después de lo visto en la elección de dirigente los imagino como el avestruz con la cabeza en el hoyo, sin ver, sin querer ver la corrupción encabezada por Marko Cortés y pandilla ¡Lástima!, del partido de la gente decente y de hombres y mujeres libres parece ser que solo queda el recuerdo ¡Lástima!... En ese camino y siendo optimistas, la militancia del PAN tiene dos alternativas (por la dirigencia no doy un cacahuate): 1.- Aceptar la crítica, respetar la libertad de expresión y reflexionar sobre ello, es decir, escuchar y recomponer el camino, o 2.- Censurar a los críticos, expulsarlos (como el PRI de Alito) y hacer oídos sordos contándose sus propias mentiras como la de combatir la corrupción corriendo a los Yunes, mientras eligen a Romero y veneran a Marko Cortés… el de las notarías, la venta de candidaturas (ver el caso de los dos Yunes senadores nada más como ejemplo) y las negociaciones corruptas.
¿Por qué asumo y opino que el flamante dirigente del PAN, Jorge Romero, es corrupto?: Primero por su silencio cómplice, que en sí es corrupción, respecto a las corruptelas y trapacerías de Marko (pecado que, como el Coronavirus, infectó a gran parte de la militancia panista) y sin duda por su silencio antidemocrático ante la forma en que muchas de las dirigencias y liderazgos estatales impulsaron de manera antidemocrática su candidatura imponiendo la firma de apoyo como candidato a las “bases”. Segundo: por la cantidad de testimonios de líderes y exlíderes del PAN que lo conocen, así como de políticos y respetables analistas políticos que saben de qué hablan, cito primero a Carlos Marín en el periódico Milenio, que describe el señalamiento de la Señora Presidenta y el testimonio del expresidente Felipe Calderón: “… Sheinbaum reaccionó exhibiendo lo que Calderón dice en su libro Decisiones difíciles:
“Jorge Romero, de la Ciudad de México, ex delegado en Benito Juárez, famoso por los casos de corrupción que constantemente empresas extorsionadas revelan. Un amigo suyo y sobrino mío me relató que dejó de trabajar con él cuando el propio Romero le confesó que asociaciones de ambulantes y otros le representaban a su grupo ganancias de siete millones de pesos al mes. Con ellos, además, habían filtrado el padrón del PAN en toda la ciudad…”.
Y no son los únicos; cito a Eduardo Ruiz Healy en El Imparcial: “La elección de Jorge Romero revela un PAN desgastado y fragmentado, incapaz de conectarse con nuevas bases o de innovar su mensaje. Señalado por vínculos con corrupción y clientelismo en la alcaldía Benito Juárez, Romero simboliza el alejamiento del PAN de sus principios fundacionales y de su incapacidad para reinventarse. Más que un partido en ascenso, parece una agrupación que se desmorona bajo el peso de sus conflictos internos y su falta de visión para el futuro.” … cito a Ciro Gómez Leyva en El Excélsior: “Por ello, reafirma el diputado Germán (Martínez), lo responsable es ser de oposición. Cita a Unamuno: hay que gritarle mentiroso al que miente, ladrón al que roba. Sus palabras van destinadas a Jorge Romero, quien hoy asumirá la presidencia del PAN y hace tres días pensaba que la presidenta Sheinbaum saludaría de buen grado su mano extendida y en cambio le recetó un severo uno-dos-tres en las mañaneras: de corrupto, lo etiquetó tres veces.” Y hay más, lástima que no tengo espacio para “iluminar” más a los panistas que hicieron a un lado a Adriana Dávila que representaba la esperanza de que al partido regresara a sus principios fundacionales democráticos, éticos y morales, para respaldar gobiernos que con base en la Doctrina Social de la Iglesia Católica plasmada en sus encíclicas, sin ser confesionales, si fueran congruentes con los principios que predican de humanismo, honestidad, democracia interna, respeto a la persona, servicio a la sociedad, amor al prójimo y decencia…
Segunda ocasión desperdiciada, bueno, quizás la tercera, porque la elección de Manuel Espino, apoyada por Fox, fue un error y un asco; la previa fue cuando con trapacerías reglamentarias, impidieron a Gerardo Priego Tapia competir por la dirigencia contra la reelección de Marko Cortés, lo que les hubiera evitado la vergüenza de tener un dirigente corrupto y obvio, hubiera abierto la puerta para que El PAN fuera un partido competitivo, que hoy no es y para que Morena no tuviera la aplastante mayoría que hoy tiene en vilo a la República.
Hoy los panistas culpan de todo a la 4aT sin reflexionar respecto a la responsabilidad de Marko y de Alito quienes, al agandllarse las candidaturas para sus contlapaches le quitaron competitividad a la disminuida “oposición”, tan necesaria para detener el tsunami de Morena y, al no responsabilizarlos, simplemente perdieron el camino, se exhiben y resaltan su incongruencia lo que se paga en las urnas, como auguro, con Jorge Romero al frente lo volveremos a ver en el 2030… Así de sencillo.
Un saludo, una reflexión
Santiago Heyser Beltrán