Ganadores, perdedores y la más suertuda de la 4T
El día tan esperado llegó y hoy ya sabemos quiénes serán las candidatas que competirán por la sucesión presidencial el próximo año.
Para nadie salvo para Marcelo Ebrard y su equipo, fue una sorpresa que la candidata del oficialismo resultara ser Claudia Sheinbaum y al respecto me gustaría compartirles algunas reflexiones sobre el proceso interno de la 4T.
Definitivamente el gran perdedor de la contienda interna fue Adán Augusto, muchos muy cercanos dicen que inclusive era el favorito del presidente rumbo a la sucesión presidencial; cercano, leal, hecho a la medida, con similitudes de origen, apellido y hasta físicas, el ex secretario de Gobernación garantizaba una plena continuidad del proyecto del Presidente, porque básicamente siempre ha sido como una extensión de Andrés Manuel. Este personaje gozaba del respaldo y las simpatías del inquilino de Palacio Nacional e inició el proceso interno como uno de los grandes favoritos. Pero con el paso de los días, sus excesos, errores y los escándalos en los que se vio envuelto con su entonces vocera la diputada Andrea Chávez, fueron debilitando estrepitosamente su popularidad hasta llegar a un punto irreversible, perdiendo no solamente entre 15 y 20 puntos respecto a las primeras mediciones, sino mucho más relevante, perdiendo la confianza y el respaldo del Presidente Andrés Manuel y con ello cualquier posibilidad de resultar electo.
Y como en todo cuando alguien pierde, alguien tiene que ganar y en esta ocasión no precisamente fue la ungida, me refiero más bien al personaje que desde mi opinión, ganó en esta contienda; Si, el siempre rebelde, polémico y subestimado Gerardo Fernández Noroña y créanme cuando les digo que también inició el proceso como mi “corcholata” menos favorita, pero congruente con su trayectoria, Noroña se mantuvo como la opción disruptiva que daba la nota, que destacó por su liderazgo como luchador de izquierda y que además supo ejercer también al interior del grupo de las “corcholatas”, no solo sumando puntos respecto a las primeras mediciones que lo colocaban en los últimos lugares, sino demostrando tener la razón y cerrar en un contundente tercer lugar, superando a Adán Augusto, gran mérito además si comparamos el derroche de recursos de este último en comparación con Noroña. También creo que su actuar de las últimas semanas fortaleció el vínculo con el Presidente, dejando mucho mejor parado al PT respecto a la “corcholata” del Partido Verde que más bien resulto gris y de quien la verdad no hay prácticamente nada que rescatar porque ya sabemos todos cuál fue su papel en este proceso y en lo que se viene. De Monreal tampoco hay mucho que decir, me parece que los puntos obtenidos en la encuesta no le serán suficientes para pelear la CDMX, y dado que también fue el primero que salió con señalamientos hacia sus compañeros, creo que podría ser mejor valorado en el Frente y acceder a una mejor negociación. Al tiempo con este personaje.
Y aunque muchos digan que el gran perdedor fue Marcelo, la verdad es que a mí me cuesta verlo así. En primer lugar, creo que Marcelo nunca tuvo ninguna probabilidad de ser el elegido, porque siguiendo la historia de Andrés Manuel y conociendo lo que lo mueve a la hora de elegir a sus ungidos, es más que evidente que el Presidente lo que buscaba en su “corcholata” eran “virtudes” como la sumisión y la lealtad ciega que le garantizaran una verdadera continuidad y la permanencia en el poder y definitivamente con Marcelo solo hubiera tenido una perdida anticipada de este, porque como bien refirió el mismo Marcelo, él estaba convencido de que Andrés porque se la “debía” se la “pagaría”, gravísimo error frente a un narcisista. También creo que Marcelo nunca estuvo realmente en la preferencia de la ciudadanía como él creía, más bien me parece que antes de la irrupción de Xóchitl Gálvez la oposición estaba jugando a incidir en la decisión de MORENA eligiendo al menos peor, al menos radical, al más desapegado de Andrés Manuel y ese era Marcelo, quien supo subirse a esa estrategia e intentar quedar bien con propios y ajenos a su partido, estrategia que debieron corregir, porque una vez que la oposición tuvo una opción verdaderamente competitiva, se vio reflejada esa disminución en las simpatías del ex canciller.
Es Claudia, y es porque las circunstancias estuvieron a su favor; Es Claudia, porque es Xóchitl y ahora sí el Presidente necesita a su “corcholata” más competitiva; Es Claudia, porque entendió el papel que tenía que jugar al grado de mimetizarse con el Presidente y hasta hablar como tabasqueña; Es Claudia porque fue la “corcholata” que mejor entendió el juego de sucesión del Presidente y quien menos se equivocó; Es Claudia porque al palomearla claro que hubo cargada y apoyos evidentes que incidieron; Es Claudia porque hasta en el ajedrez para vencer a una reina, resulta más competitiva otra reina y ya que recientemente el tablero cambió, la estrategia también tuvo que cambiar.
Mi penúltima reflexión de hoy va con Marcelo, porque si bien creo que en este proceso interno ni ganó, ni perdió es porque sigue en el tablero jugando y al respecto veo dos escenarios.
Romper con quien tiene el poder me parecería poco inteligente de su parte en estas alturas de la partida, así que todo esto me parece que puede ser parte del plan de Andrés Manuel de dividir a la oposición de la mano de Dante Delgado quien sostiene que MC irá solo y de Marcelo quien sostiene su aspiración presidencial. Una jugada altamente riesgosa para MC, pero bastante redituable para Andrés Manuel y su pupila.
Y la otra; Marcelo por fin se rebeló, se cansó, se hartó y su rompimiento con el Presidente y la 4T es real, convirtiéndose en adversario de Claudia y sumando en otros Frentes para que no llegue a la Presidencia, de lo contrario es muy probable que se tomen medidas contra el ex canciller, ya sabemos que eso del resentimiento y la venganza son sentimientos que caracterizan al movimiento de la 4T. Porque la verdad es que después de todo lo dicho, no veo por dónde Marcelo se quede a apoyar a Claudia.
Mi última reflexión es mi favorita y es que no es minúsculo el logro de contar con dos mujeres para competir por gobernar un país tremendamente machista. A pesar de ello todo apunta a que sí o si en México tendremos por primera vez a una Presidenta y eso ya es motivo suficiente para emocionarse.
Ustedes ya saben con quién están mis simpatías, yo te pregunto ¿y las tuyas?
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