El Salto Tepuxtepec/Gerardo A Herrera Pérez
Derivado del trabajo que se realiza desde la sociedad civil para el desarrollo de actividades en materia de respeto al medio ambiente y la biodiversidad, pero también de los elementos de la naturaleza: agua, tierra, luz, aire; y que en su conjunto han permitido importantes aportes para diferentes actividades, pero en materia del agua: principalmente la vida comunitaria, la generación de luz, riego para la agricultura, control de humedad de la región y la pesca como una actividad productiva y alternativa para el consumo local y de autoconsumo.
Todos los cuerpos de agua son importantes, por la función que realizan a favor del humano, pero también de otros seres vivos, y del propio medio ambiente; la importancia de conocerlos y saber de ellos como la cascada el Salto en la Piedad, o bien, como la presa del Salto, ambas articuladas a procesos hidroeléctricos. Derivado de distintas visitas que se han realizado cuando asistimos a Contepec, o camino a Epitacio Huerta, es obligado detenerse a observar este cuerpo de agua en Tepuxtepec, por lo que le pedí a Edgar Alvarado Osornio, preparar esta nota de manera conjunta, toda vez que el nació en Tepuxtepec, municipio de Contepec.
La presa del Salto se ubica sobre un cañón por el cauce del río Lerma, en el Salto de Tepuxtepec, en la parte baja de la cabecera municipal de Contepec.
A 95 años del inicio de su construcción (1926 a 1950), fue resultado de diseño de políticas públicas federales a través de la Comisión Nacional de Irrigación, mismas que acompañaron a la fundación del pueblo Tepuxtepec en 1927, cuando los propietarios de la hacienda de Tepuxtepec donaron a los nuevos pobladores del centro urbano el predio que actualmente ocupa y que fue trazado por una yunta de bueyes, dice la tradición oral; el pueblo creció gracias a que los vecinos del lugar quienes fueron los que construyeron la presa y la Central Hidroeléctrica durante el mandato en la gubernatura de Michoacán del General Lázaro Cárdenas; más tarde fue el presidente Pascual Ortiz quien termina la obra civil y entra en operación sus dos primeros generadores, en los años treinta del siglo XX.
La presa del Salto capta los escurrimientos de agua provenientes de los cerros Altamirano, Prieto, Zorrillo, Cerco, Gamboa, Alto y Borrego, los principales usos que se da al agua de la presa son: la generación hidroeléctrica, riego agrícola y pesca de subsistencia, así como el turismo en su cascada en los tiempos de lluvia cuando sube el nivel del agua en la presa y abren sus compuertas.
Otras de sus principales funciones es la de regular el caudal del río Lerma hacía la presa de Solís, la cual riega grandes extensiones agrícolas del Bajío y protege al valle de Maravatío de inundaciones frecuentes que padecía.
Pese a sus ya más de noventa años de operación, la presa como otros cuerpos hídricos requiere de ser analizada a la luz de la complejidad, es decir, no basta solo expresar que tiene ya problemas, sino que estos problemas se pueden reflexionar desde la perspectiva de las crisis medio ambiental, social y mental que ya vivimos, así como de la crisis financiera que se continua viviendo derivado del modelo económico que se opera en gran parte del mundo y que ha ido permitiendo que crezca la privatización de muchos servicios que antes fueron administrados por el estado y que ahora están en manos de la iniciativa privada.
Félix Guattari, plantea a través de su texto Las tres ecologías, una reflexión importante con relación de lo que está sucediendo en estos momentos con el Planeta Tierra, en donde se aprecia un desequilibrio ecológico que amenaza a corto plazo, sino se le pone remedio (Agenda 2030 de la ONU); pero esta misma situación ya tensa las relaciones con la vida humana, tanto individual como colectivamente; y lo hace en el espacio familiar, como en los espacios relacionales, o bien, los públicos. Y es que estos tiempos, son tiempos de la Posmodernidad, del Neoliberalismo y la globalización, que lo importante es el mercado y la ganancia.
A la fecha la presa del Salto de Tepuxtepec como otros cuerpos de agua en el estado, sufre de problemas de contaminación proveniente de residuos industriales y desagües traídos por aguas río arriba durante el paso del Río Lerma por el Estado de México. Lo anterior ha generado una caída en la actividad de pesca obligando a pescadores a dedicarse a actividades diversas para mantener a sus familias, principalmente salir a realizar actividades de albañilería. Pero igualmente dañan los cultivos y los alimentos que se generan, además de que se dan procesos de evaporación y por ende de impacto ambiental. De ahí la importancia de que las autoridades realicen estudios para la conservación de los cuerpos hídricos, lo que incluye utilizar como método la complejidad, para hacer una revisión holística y sistémica de lo que está pasando en aquella región altamente productiva, no solo de maíz, sino de otros cultivos altamente rentables.
Es de vital importancia crear conciencia de que somos los humanos con nuestras actividades que presionan los elementos de la naturaleza, derivados de un mercado y de hiperconsumo que ponemos en peligro a nuestra tierra y muy a menudo lo invisibilizamos, por ello, la importancia de trabajar desde la perspectiva del otro, es decir, no solo de lo humano, sino de los seres vivos. La vida al centro, sin antropocentrismos, en reconocimiento a todos los seres vivos, y en respeto a los elementos de la naturaleza, agua, tierra, para continuar en tareas de protección, cuidado y conservación de la naturaleza.