El renacimiento del Poder Judicial
El juego de “vencidas” que pretende imponer la Suprema Corte de Justicia de la Nación a los poderes Ejecutivo y Legislativo tratando de cancelar la aplicación de la reciente Reforma Judicial ya promulgada, ha llegado ya a extremos grotescos con la decisión de la ministra Norma Piña quien preside la Corte y a la vez el Consejo de la Judicatura Federal, de someter a discusión de esos órganos la validez de dicha reforma.
Ignorar la fuerza política y jurídica que respalda a la Reforma sólo puede calificarse de una provocación; lo que llevó a la Presidenta Claudia Sheinbaum a declarar que no caerá en provocaciones ya que se ha llegado al extremo de emitir por un Juez la orden al INE de suspender toda acción preparatoria para la realización de las elecciones que mandata el texto constitucional hacia la elección de los funcionarios del Poder Judicial, ello, sabiendo que el INE por ley, sólo responde a la autoridad del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y no al aparato que controla la ministra Piña.
Dicho lo anterior, hay que recordar que en función de los artículos transitorios de la reforma en marcha, hay fechas límite que no pueden soslayarse por lo que se verá en los próximos días el avance del proceso que tendrá un momento clave en junio de 2025 con las elecciones en urnas de l@s funcionari@s de primer nivel del Poder Judicial.
¿Qué espera a la ministra Norma Piña y seguidores? En primer lugar, el emplazamiento legal por las graves violaciones a las leyes laborales por los paros sin sustento y el cobro indebido de salarios y demás ingresos sin devengarlos y por la violación de normas constitucionales que prevén la distribución de competencias en cada uno de los poderes de la Unión y lo cual ha sido violado por ellos.
Adicionalmente, al violentar los términos de la reforma judicial, l@s funcionari@s involucrad@s quedarán al margen del inminente proceso de elección en el Poder Judicial al no participar en la convocatoria que está por publicarse, dejando el campo libre a candidaturas que no proceden de ese Poder. Con ello se allanará el camino para lograr un verdadero renacimiento del mismo con nuevos actores que trabajarán por fin bajo principios y normas que ahora sí serán respetados.
México tendrá por primera vez en décadas la posibilidad de contar con un Poder Judicial que será un baluarte central del estado de derecho (ausente por décadas). Las mayorías podrán confiar por fin la atención de los conflictos y asuntos colectivos e individuales a funcionari@s comprometid@s con la legalidad, honestidad y compromiso con la justicia.
Los cambios no serán instantáneos, pero, sí se verá en lo inmediato el avance de la renovación de la justicia mexicana y con ello, será factible que todo el proceso renovador abarque en un corto tiempo histórico a todas las estructuras relacionadas con la justicia en los tres órdenes de gobierno.
No hay bien que por mal no venga. La conducta irracional de las cúpulas del poder judicial actual ha permitido que se evidencie la incapacidad de regenerarse exhibiendo la arrogancia e ignorancia con la que manejaron por décadas. Su marginación del ámbito de la impartición de justicia se ha adelantado por decisión propia.
La Cuarta Transformación avanzará con mayor solidez al contar con procesos democráticos en la renovación de los tres poderes de la Unión. Bien por el presente y el futuro de México.