El gallo bueno…/Santiago Heyser
El gallo bueno…
Cuentan que en un Palenque, un gringo preguntó al gallero: - ¿Cual ser el gallo bueno?”, el gallero contestó: - El Giro. El gringo le apostó sus dólares y perdió.
Conocida es la anécdota del gringo y el gallero; donde, en un Palenque, un gringo preguntó al gallero: - ¿Cual ser el gallo bueno?, el gallero contestó: “El Giro”;… el gringo le apostó sus dólares al Giro y perdió. El gringo le reclamó al gallero: - Ud. decir que el gallo Giro ser el bueno y Ud. mentir. - ¡No mister! <Replicó el gallero>, yo no mentí, el gallo Giro era el bueno, el Colorado ¡No!, ese gallo es un asesino, criminal, hijo de su tiznada madre… Esto viene a colación por el nombramiento de algunos funcionarios para el futuro gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en particular casos como los de los priístas (dicen que eso no se quita ni con lejía) tranzas y mañosos como Manuel Bartlett (el de la caída del sistema), Marcelo Ebrard (el de la Línea 12 del Metro que salió carísima y no sirvió, pero el no hizo nada malo (¿?)) o Ignacio Ovalle (exSecretario particular de Luis Echeverría, sin comentarios) Decía que el cuento del gringo y el gallero viene a cuento, valga la rebuznancia, porque AMLO no está poniendo a los gallos buenos en esas posiciones, está poniendo a puro hijo de la tiznada que le puede dar resultados,… o no, esa es su apuesta y su privilegio.
Yo no sé si ese es el cambio por el que voto el electorado, lo que sí sé, es que Andrés Manuel es el Presidente electo con una histórica mayoría y que una actitud patriótica sería apoyarlo, sin cerrar los ojos a la realidad y sin dejar de ser críticos y señalar lo que está mal. Ingenuo sería esperar que se combata la corrupción si se rodea de los “buenos” de siempre (muchos de ellos hoy en el Congreso), que, parodiando al “Jolopo”: nos saquearon y si los dejamos, nos volverán a saquear.
Lo mismo pienso del fiscal anticorrupción, ingenuo sería pensar que todos los mexicanos estamos contentos con el cambio; seguro quienes ven afectados sus intereses están temerosos, no solo de perder canonjías sino hasta de ir a la cárcel con todo y lo perdonador que anda el de Macuspana. Escuchaba a Denise Dresser señalar que no se busca un fiscal al servicio de intereses privados, nacionales y/o extranjeros, que se busca un fiscal incorruptible, uno que no sea carnal del Ejecutivo, uno al servicio de México e independiente del poder presidencial… ¡Si Chucha, toma tus calzonzotes!, como si alguien me pudiera garantizar esas características en un funcionario (Ni los jueces de la Suprema Corte me dan esa certeza). Me explico: no tengo la menor duda de que habrá tranzas de algunos (muchos) funcionarios morenistas que no entendiendo el mensaje de honorabilidad y decencia de Andrés Manuel, sientan que es solo rollo y que les llegó su tiempo de robar; también se dará el caso de algunos (muchos) funcionarios que por novatos, ingenuos o abiertamente pendejos cometerán errores. En ambos casos, sin duda los perdedores (entiéndase: la chiquillada PRI, PAN y PRD, más sus comparsas, intereses ajenos a México y comunicadores comprados) tratarán de magnificar las pifias o las tranzas de los funcionarios y tratar de cargárselas todas al Presidente, para demeritar su trabajo o entorpecerlo, tratando de generar animadversión para debilitar el apoyo popular y tratar de revertir las cosas en futuras elecciones y así volver a los “negocios” al amparo del poder y a la repartición de “huesos” a compadres, amigos, parientes (ver Puebla), a correligionarios, empresarios corruptos (no todos) y a políticos afines. En otras palabras, no tengo duda que contrario al interés nacional, intereses muy poderosos tratarán de desbarrancar la intención del Presidente electo de combatir la corrupción, como dije, por miedo o por mantener el status y sus “negocios” al amparo corrupto y corruptor del modelo priísta (adoptado por muchos) y el de sus socios políticos. En este entorno, un fiscal al servicio de intereses ajenos al interés nacional sería una inocentada y haría mucho daño, dejar el nombramiento del fiscal anticorrupción a la “sociedad civil” o a un grupo de “notables” que a nadie representa, que nadie los eligió y que con certeza puedo asegurar, algunos (muchos) de ellos tienen intereses particulares o intereses inenarrables por una sencilla razón ¡Así es la naturaleza humana! Pregunto: ¿Estimado lector, votarías por EPN para que fuera el fiscal anticorrupción? ¿No? Pues resulta que el tipo, con su copetito, logró engañar a millones de mexicanos(as) haciéndoles creer que era patriota, honesto, capaz y que no estaba al servicio de los intereses de capitales extranjeros ¡Sí!, engañó a millones de mexicanos de la “sociedad civil”, la “sociedad civil” no es infalible, ni ajena a la corrupción... Es por ello que comparto: no se debe ceder o concesionar el mandato ciudadano que dimos a AMLO para que gobierne, ello incluye el control (y la responsabilidad asociada) sobre los nombramientos clave, para no caer en dependencia de intereses ajenos a México, por ceder el mandato constitucional de gobernar, a grupúsculos de la sociedad civil, algunos decentes ¡Sin duda!, pero no todos, algunos capaces ¡Sin duda!, pero no todos.
De los recién nombrados: Coordinadores estatales de Programas de Desarrollo, hablaré de nuevo durante la semana, en tanto comparto una reflexión: Si a AMLO le va bien, pues a él y a su familia les va bien, pero, si gobierna bien, a México le va bien ¡Ayudemos sin ser comparsas!… ¡Así de sencillo!