Diálogos de vida/Santiago Heyser
“Mujeres divorciadas”
Cada domingo en el espacio de: DIÁLOGOS DE VIDA, sin tintes religiosos y bajo la batuta de Santiago Heyser, Coach de Vida certificado por la Federación Mexicana de Life Coaching, atenderemos temas sobre la vida, sus problemas y una propuesta de solución.
Si quieres que se atienda un tema o una situación en particular, escribe al correo: [email protected] (sin acento) Todos los correos serán contestados y las situaciones que destaquen serán publicadas en el espacio dominical de Quadratín.
Todos los correos son confidenciales y por favor, no firmes con tu nombre, usa un seudónimo para que te identifiques con la respuesta. Seudónimos válidos son nombres de flor, de estrellas, planetas, animalitos, sentimientos o cualquiera no ofensivo que te haga sentir bien; ej. Creo estar enamorada… (firma: Mal correspondida)
Este domingo tocamos el tema de las mujeres divorciadas; el próximo domingo, por cuestiones de espacio, continuaremos con el tema.
En tanto ¡Se feliz!…
Atentamente
Quadratín
Uruapan, Michoacán, 13 de abril del 2019
“Mujeres divorciadas”
Algo que se vuelve cada día más recurrente, es el caso de padres divorciados; ¿la causa?: ¡Una mala preparación para el matrimonio!, pero ojo, esto no afecta por igual a los hombres que a las mujeres.
Un matrimonio termina, en mi opinión, porque es natural que se acabe, ya que las personas estamos cambiando continuamente. Las razones del fin del matrimonio son muchas; ¿la principal?, porque no nos preparamos para el matrimonio y partimos de falsas premisas: como la de que el matrimonio es para toda la vida o la de estar enamorado, y esto tiene una razón, ni el matrimonio es para toda la vida y la mayoría no tiene idea de lo que es el amor; el que confundimos con enamoramiento o con calentura, definiendo enamoramiento como el éxtasis que genera un bienestar producido por la sensación de aceptación y comprensión de parte de una pareja que ni nos conoce, ni nos acepta, ni nos comprende, a la que percibimos como el príncipe o la princesa del cuento; la calentura la defino como la atracción física con bases hormonales, derivada de varios factores, uno de ellos muy poderoso ¡La atracción sexual y el instinto de reproducción!, que se dispara con motivadores que tienen su origen en la vida misma, la preservación de la especie y la propia naturaleza sexual de los seres vivos que gustamos del placer físico, atracción que no excluye conceptos culturales como posición social o económica, atracción por la personalidad y forma de ser de él o de ella o cuestiones instintivas como la forma de mirar, el aroma corporal o el estilo de expresarse, de vestirse o de moverse. No es casualidad, como consecuencia de lo anterior, que el baile sea una forma de cortejo que se da en muchas especies animales ¡Sí!, pero también en los seres humanos en todas las culturas, como no es casualidad que el simple contacto físico o visual dispare endorfinas que confundimos con sentimientos de afinidad o de amor a primera vista… Del amor hablaremos terminando el asunto del divorcio, por hoy sigamos con el tema:
Por cuestiones culturales, económicas, sexuales y emocionales, el divorcio afecta de diferente manera a los hombres y a las mujeres, lo que no excluye que según las circunstancias los papeles se inviertan. Salvo casos en donde la mujer es maltratada o golpeada, en donde el divorcio es una liberación del sufrimiento, es común que equivocadamente, (subrayo: equivocadamente) la mujer se sienta devaluada. Las razones son muchas como problemas con la propia autoestima o el sentimiento de rechazo, una de ellas, la precepción cultural de la edad; si un hombre de 40 o más años se divorcia, es un prospecto para muchas mujeres y se siente como gallo suelto en gallinero nuevo (es feliz), en cambio una mujer de 40 o más es una mujer madura que tiene que competir con veinteañeras y treintañeras para tener pareja o conformarse con un vejete sesentón (es infeliz); otra razón es la maternidad, si la mujer se queda con el cuidado de los hijos, es una fuente permanente de conflictos con el ex y es un esfuerzo y una carga económica y emocional que no siempre es recompensada con agradecimiento, a ello añadamos que los hijos se vuelven un problema de tiempo y libertad si se desea construir una nueva relación. Por cuestiones prácticas, una mujer con hijos no es incentivo masculino para una relación formal, por la responsabilidad y conflictos que representan “cargar” con hijos ajenos; desde el trato permanente con el ex, hasta el rechazo emocional de los entenados o hijastros sustentado en el celo por la madre y el cariño por el padre al que no quieren ver reemplazado, pasando por el costo de manutención; si la mujer no se queda con los hijos ¡Peor!, se siente fracasada, no valorada y mala madre que no supo construir lazos afectivos con los hijos, para que la quisieran más que al padre (competencia irracional), a pesar de que ella los llevó en su vientre y sufrió amorosamente los dolores de parto (les dio vida)… En la próxima entrega dominical ampliaremos el tema, de momento no me quiero despedir de ti, estimado lector(a), sin aclarar: ¿porque subrayé que equivocadamente la mujer se siente devaluada?: Primero, porque la vida no es, o no debería ser en los seres humanos una competencia por encontrar pareja, lo que no excluye que la mujer adulta pueda (y deba) tener una vida sexual activa y gratificante (ley natural); una mujer sola, productiva y realizada profesionalmente, con o sin hijos, soltera, viuda o divorciada puede perfectamente se feliz, aún sin tener un hombre en casa. En mi opinión, una mujer madura, mayor de 30, 35 o 40 años, es más atractiva sexualmente y como compañera que una veinteañera. Además, una relación con una mujer adulta o madura es más gratificante y nutritiva, una mujer con vida e historia tiene una plática más interesante y si a ello añadimos cultura, lectura e inteligencia, es padrísimo y enriquecedor el tiempo compartido con esa mujer, más allá de lo sexual… Lo que me llevaría a una conclusión o consejo: Mujeres solteras, viudas y divorciadas, no se preocupen por estar solas, esas son pendejadas, preocúpense por su desarrollo personal y el cultivo de su inteligencia, preocúpense por Uds., quiéranse, cuiden su cuerpo y su salud y aprendan a ser felices en cualquier circunstancia y en cualquier etapa de sus vidas, cultiven su intelecto, lean mucho, aprendan cosas y dejen de ver en la pareja o en los hijos el sentido de la vida, la vida está en Uds., aprendan de Uds., disfruten de su sexualidad lo mismo que de un atardecer y déjenle al destino el encontrar un príncipe azul, lo que no debe ser el eje de sus vidas ¡Porque valen mucho!… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser
Coach de Vida