¿Cómo van los aspirantes presidenciales?
A estas alturas, donde la sucesión presidencial ha dado un giro al paradigma político, el escenario luce muy interesante. Resulta que, en este momento, los estudios que miden la percepción ciudadana muestran tópicos que nos obligan a reflexionar, pero sobre todo a ponderar cómo se ha ido moviendo el juego por la silla presidencial en Morena, incluso con un contenido de mucho valor para quienes estudian las cifras o porcentajes numéricos.
Dentro de ese universo numérico la empresa MW Group publicó el Análisis de la Conversación Sociodigital, levantó una investigación metodológica sobre el alcance de algunos aspirantes presidenciales no solo de Morena, sino de otras fuerzas políticas. De hecho, esa misma institución demuestra que Ricardo Monreal va en ascenso al ponerlo con un 12.27 por ciento, por 25.86 de Sheinbaum, 16.26 de Ebrard y 14.40 de Creel.
Es fundamental, en esa perspectiva, analizar muy bien los tópicos que arroja la metodología demoscópica. En ese sentido, los datos son muy claros: avanza Ricardo Monreal a pesar de casi un año de ser excluido y no ser considerado “corcholata” por el presidente López Obrador y las campañas en contra que, de por sí, fueron sofocantes en un clima disparejo y lleno de favoritismo porque cuando a unos los elogiaban, a otros los descalificaban con punitivas estrategias.
Eso lo vivió en carne propia el Senador Ricardo Monreal. Sin embargo, en muchos espacios de opinión aseguramos que, en lugar de debilitarlo, paradójicamente más lo fortalecen. Dada esa situación, la empresa MW Group y Análisis de la Conversación Sociodigital ratificó lo que pronosticamos porque la guerra sucia dejó de ser útil como en otros tiempos donde predominaba la enajenación o el miedo al poder institucional que sometía a la población civil.
Respecto a esa coyuntura la actualidad es distinta y, hoy por hoy, todo gira en torno al proyecto o visión de nación al punto en que, la población civil, lo muestra en la percepción o alcance de las encuestas.
Eso está sucediendo con Ricardo Monreal que, pese a la exclusión y veto presidencial, ha ido caminando al contar con un proyecto de reconciliación desde un programa de nación que ha ido promoviendo a lo largo y ancho del país. De hecho, el coordinador de los senadores de Morena apretó el paso a estas alturas de la competencia donde muchos otros aspirantes muestran un desgaste natural como el caso de Claudia Sheinbaum, que va a la baja en las mediciones.
Sabemos que, parte de ese crecimiento que alguna vez experimentó la jefa de Gobierno de la ciudad de México, fue gracias al impulso exagerado que le brindó el presidente López Obrador. La cuestión es que, en este preciso instante, no prende o dejó de ser funcional la estrategia de favoritismo, incluso, la empresa MW Group y Análisis de la Conversación Sociodigital, mostró una perspectiva negativa en su estudio que divulgó con un descenso de más de 20% en percepción en contra de Sheinbaum.
En cambio, el Senador Ricardo Monreal tiene un alcance potencial de usuarios únicos de 51,281,414, lo que representa un crecimiento de 13.10%, en comparación con el mes anterior. Esto significa que, quién más crece en estas semanas, fue el coordinador de los senadores de Morena que anunció, hace unos días, que intensificará sus giras por todo el territorio nacional, justo cuando la contienda interna luce interesante porque se equilibra un poco la balanza atribuida, eso sí, a la resistencia que encabezó el zacatecano en más de 18 meses.
Muestra de ello es que, hoy en día, el juego sucesorio presidencial, a comparación de otros meses, muestra otros datos. Uno de ello, sin duda, el crecimiento en las encuestas de Ricardo Monreal de acuerdo con la ponderación de la empresa MW Group y Análisis de la Conversación Sociodigital.
Claro y contundente: así fue el ascenso que vivió el coordinador de los senadores de Morena que siempre mantuvo la vela encendida en tiempos donde el diluvio parecía devastador e infalible. Sin embargo, el zacatecano es un fuera de serie ya que- cuando se plantea un objetivo- no ceja hasta conquistarlo. Hoy, en ese sentido, la presidencia de la República no es un sueño inalcanzable; es, más bien, un anhelo palpable y nítido como pasó en Zacatecas en 1998 donde Monreal logró la hazaña.
Finalmente, sigo insistiendo que, en la sucesión presidencial, Ricardo Monreal es un serio aspirante a suceder al presidente López Obrador porque aparece, desde hace unas semanas, en los sondeos que empresas encuestadoras realizan, entre aspirantes a la Presidencia de la República, de diferentes partidos políticos.