Claudia la candidata
No hay fecha que no se llegue ni plazo que no se cumpla. Con el registro ante el INE hoy Claudia está en la víspera de arrancar con la fuerza mayoritaria del pueblo a la etapa final del proceso electoral.
El 1 de marzo ya muy próximo y con el registro oficial como Candidata Presidencial podrá poner sobre la mesa del debate nacional lo que significa para México el segundo piso de la Cuarta Transformación.
Ojo, mucha gente cree que ella será el relevo que llega a sustituir a Andrés Manuel en el camino que este abrió en el 2018, pero, ella es protagonista de lo que hoy se llama Cuarta Transformación desde su gestación en aquel distante sexenio 2000-2006 en el que intervino en el gabinete de AMLO. Sabe entonces de qué se trata y ahora simplemente se apresta a tomar la batuta de la orquesta.
Andrés Manuel, por su parte, con el tsunami histórico que provocó su gestión como Presidente a partir de 2018, está dejando las bases de lo que sigue. Esto se ve claramente con la agenda de reformas constitucionales que ya marcan el futuro de México.
Por lo anterior, es apropiado hablar de la época de Andrés Manuel y Claudia sin separación alguna de lo que es un solo proyecto, la 4T y el cual tiene como base insustituible a un pueblo levantado sin el cual nada tendría sentido tal como lo ha reiterado AMLO desde que recibió la banda presidencial.
Dicho lo anterior, despierta grandes expectativas precisar en qué consiste la 4T en su versión 2.0 cuya agenda llenará el escenario y el debate nacional en el inminente período que va del 1 de marzo a 2 de junio.
A pesar de la fuerza del tsunami obradorista que ha avanzado con una gran fuerza popular conquistando a mas de 20 gobiernos estatales, más los que se vestirán de guinda el 2 de junio y con una fuerza legislativa que logrará según todas las previsiones serias la mayoría calificada del Plan C para darle fuerza constitucional al cambio verdadero, la derecha electoral y los poderes fácticos que la apoyan, no renuncian a combatir desesperadamente con toda clase de infundios y calumnias descabelladas que les quita toda seriedad.
En la marcha de la derecha de este domingo 18 de febrero, Lorenzo Córdova, arropado por el PRIAN -al que dedicó su gestión cuando dirigió al INE- fue el único orador y reconoció que son minoría; dijo además: “Que quede claro, no estamos impidiendo el cambio. Hay muchas cosas que pueden y deben mejorarse, pero eso no implica que se deba echar por la borda lo que hemos conquistado” .Seguramente se refirió a las conquistas de la minoría rapaz que usó el poder para su beneficio durante los seis sexenios anteriores y que terminó por la explosión popular de 2018.
El tema de Lorenzo fue salvar la democracia con elecciones limpias(¡!). Sí, ellos quienes realizaron los escandalosos fraudes de 1988, 2006 y 2012 ¡se disfrazan ahora como defensores de la democracia!.
Pero, en 2024 vivimos una realidad que es inapelable: la correlación de fuerzas le favorece al pueblo de México y no queda duda: millones demostrarán este 2 de junio lo que es la democracia sin simulaciones ni fraudes.
¿Quién puede ya detener o descarrilar al tren de la fuerza mayoritaria que marcha hacia el cambio verdadero?.