Centro cultural La Parota
Gerardo A. Herrera Pérez.
Desde la torre vigía de la Mira, municipio de Lázaro Cárdenas, se erige una estructura edilicia rodeada de parotas las cuales: son grandes, frondosas, vivas, añosas, que siguen siendo el techo de la diversidad de fauna de aquella región y que dan sentido al principio de sostenibilidad para el Centro Cultura la Parota.
La Parota, es el resultado de un proceso administrativo para el impulso de la cultura de la Mira, Michoacán, grandes personajes ahora, dieron estabilidad al proyecto hace 23 años, entre ellos Sergio Omar García, y desde luego en la dirección artístico cultural su directora María Concepción Talavera Ortíz, la muy apreciada y transparente Conchita, que a más de dos décadas continua con energía, generosidad, talento y creatividad, invitando, impulsando y compartiendo un proyecto que redefine el sentido de la cultura incluyente para la zona costa sierra de Michoacán.
Desde La Parota, diversos grupos de la costa principalmente artísticos tuvieron el escenario deseable en estos años, para presentar su performance: ya musicales, desde la danza, en la fotografía, en la pintura, y en general en las bellas artes, me ha tocado estar presentes en algún momento en dichas acciones en donde se puede constatar la presencia generacional de todos, todas, todes, la niñez, la adolescencia, la juventud, los adultos y adultos mayores que en interseccionalidad todos caben acomodados y participando en este proyecto cultural.
Han sido más de dos décadas de proyectar, programar, acompañar, evaluar, presentar y, compartir el arte entre la población de aquella región; muchos son los compañeros y compañeras quienes han trabajado, incluso ahora durante la pandemia por el COVID-19, nunca dejaron de impulsar actividades refrendando con ello, su amor por la cultura.
En este contexto es importante reconocer a quienes han estado al frente de estas actividades, a sus directivos, a sus docentes, a quienes han estado presentes de otros espacios culturales de la costa sierra y que por ende, debían conmemoran no solo otro año más de operatividad del Centro Cultural La Parota, sino agradecer con un programa cultural a todos, todas, todes aquellas personas que siempre estuvieron ahí presentes en el desarrollo del proyecto cultural.
La Parota, ofrece un espacio inigualable para la detonación de la cultura en la costa michoacana, pero como todo requiere de ser apoyado por las autoridades, requiere del fortalecimiento en su diseño de política pública, requiere del apoyo institucional para remozar el espacio, para darle nuevamente vida, renovar los equipos, atender su techumbre ya deteriorada por los años; solo hay que recordar que es fundamental recuperar los espacios culturales para evitar la violencia entre las juventudes; por ello expresamos: que sean los instrumentos musicales que se toquen y no las armas, que sean los pinceles y las pinturas para resignificar y pintar la Paz, que sean las danzas el preámbulo para continuar manteniendo nuestras costumbres y el acercamiento con las comunidades, como la danza de la panaderas de nuestra amiga la maestra Rosa Carmina (qepd) a quien recordaremos por siempre por su generosidad, que sea la música la que nos convoque y sus letras en acompañamiento las que nos indiquen por donde transitar para la comprensión del diálogo y el entendimiento, la tolerancia y el respeto.
El Centro Cultural La Parota, es el corazón de la cultura en la zona costa sierra de Michoacán, desde ahí se bombea la energía de una gran líder, mujer, esposa, madre y madre de muchos y muchas que han creido en ella por su pureza, por ser una mujer inmaculada, libre de mancha, que ha depositado su energía en un proyecto que no recibe apoyos, más que la sonrisa y el cariño de muchos en el reconocimiento generacional a una gran mujer, la siempre viva, genuina, libre y talentosa Conchita.Hoy en su 23 Aniversario del Centro Cultural, deseamos los éxitos, los tiene ya. Felicidades, diversas actividades ya se realizaron como el taller “Házmela de cuento”, donde participaron más de treinta niños y niñas elaborando su cuento. Igualmente se llevó a cabo el taller de papel picado, donde las mujeres adultas generaron sus talentos y creatividad para la presentación de esta artesanía de papel picado, así como el taller para el manejo del papel.