A cicatrizar heridas
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Ayer sábado el Senador Cristóbal Arias presentó su cuarto informe de actividades en medio de una multitud que lo acompañó. De hecho, lo arroparon varios legisladores y el propio titular de la secretaría de Gobierno en Michoacán, sin embargo, el gran atractivo fue la presencia del presidenciable de Morena, Ricardo Monreal.
Dado que, el escenario se prestó, un emotivo mensaje de Cristóbal Arias Solís motivó a Ricardo Monreal a lanzar un gesto para reactivar la comunicación con el presidente Obrador pues la propuesta que llevó el senador michoacano tomó eco en una de las voces de mayor protagonismo en México, como es el caso del coordinador de los senadores de Morena.
El hecho fue que, en ese mensaje, traía implícita la postura de reconciliación que está abanderando Ricardo Monreal a través de su plataforma política del 2024. De este modo, el zacatecano tomó el micrófono y aseguró que insistirá en la conversación con el presidente López Obrador pues una de las mayores cualidades es, desde hace muchos años, la facilidad para abrir el compás de diálogo como uno de sus más infalibles mecanismos que es la conciliación.
Y, con ese gesto, se puede abrir una nueva oportunidad para fortalecer el proceso de unidad. Es verdad que el presidente tiene un respaldo mayúsculo de la población; pero una cosa en su imagen y otra las fracturas que puedan provocarse en el seno morenista. No es fácil contrarrestar una división producto de la polarización que se vive después de que se abrió el juego sucesorio, sin embargo, la panacea para remediar esos prejuicios está en manos del mismo jefe del ejecutivo federal.
Él, en este momento, puede corregir el camino que tiene turbulencias con tantas campañas de publicidad en contra de algunos presidenciables. De hecho, a Ricardo Monreal le ha tocado vivir la andanada que cabalga desde el poder estatal de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores. Por ello, sólo la reconciliación- mientras se haga con voluntad- podrá superar cualquier atmósfera que se generó no con buenas intenciones.
Por ello, este es un momento crucial en la vida democrática del partido de Morena y de la transición que estamos viviendo. El llamado a la reconciliación no sólo es en aras de la democratización, sino de la hermandad. Recordemos que, tanto el presidente Obrador, como Ricardo Monreal, tienen una relación añeja de entrega hacia la causa.
La mejor forma para reivindicar esa amistad es continuar fincando la unidad y la reconciliación. Ayer, en el propio informe de actividades legislativas del Cristóbal Arias Solís, el mismo Senador Ricardo Monreal lanzó un llamado o un gesto para seguir unificando posturas y encontrar un punto de coincidencias pues una manera para realizarlo es superar diferencias siendo la opción más viable para que- el presidente Obrador- se siente a dialogar con el coordinador de los Senadores de Morena.
Para ello, se deben deshacer prejuicios y paradigmas. Una forma sería- como lo aseguró Ricardo Monreal- ponderar siempre la flexibilidad, el respeto y cortesía en el trato. Esa es, en política, una manera de romper con cualquier censura o barrera que exista.
A raíz de ello, Ricardo Monreal tiende el puente para reactivar esa comunicación que era común entre ambos actores políticos. Se trata, en este sentido, de reparar o corregir cualquier suspicacia o recelo que pudo ser el detonante para poner en pausa algo que nunca debió suceder luego de endurecer las posturas contra el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado.
Atrás debe quedar eso porque- en puerta- están dos procesos claves para llegar con buenos pronósticos de cara a la elección presidencial, lo mismo la integración de ambas cámaras legislativas que serán fundamentales para continuar profundizando las políticas de la Cuarta Transformación.
Lo más justo para Monreal es que el presidente muestre voluntad para sellar o agendar un encuentro próximo y mirar hacia adelante porque- el zacatecano- es una pieza trascendental en el engranaje de la maquinaria lopezobradorista.