Fe, vigente y arraigada pese a dichos y paso de los años: morelianos
31 de marzo de 2018
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8:02
Uriel Morales Pérez/Quadratín
MORELIA, Mich., 31 de marzo de 2018.- Aunque muchos piensan que con el paso de los años las tradiciones propias de la Semana Santa han pedido fuerza, la realidad es otra, pues la población la sigue considerando viva.
Tal es el caso de la Procesión del Silencio, una conmemoración que cada Viernes Santo se hace presente en las comunidades del país que profesan la religión católica.
En el caso de Michoacán, los feligreses aseguraron que pese a señalamientos que involucran a la Iglesia Católica, esto no merma el fervor de las personas por mantener viva su conservación.
En un sondeo realizado por Quadratín los habitantes expresaron que estas creencias siguen vivas porque se transmiten de generación en generación y disfrutan estas manifestaciones.
"Venimos cada año y cada vez está más hermosa, impresionante, se le hace a uno un nudo en la garganta, es muy bonito, cada Viernes Santo venimos a verla con mis hijos y ahora con mis nietos", señaló la señora Carmen Medina.
Asimismo, los infantes presentes comentaron que les atrae el sonido de los tambores y las grandes imágenes religiosas cuyo dogma han recibido de parte de padres y abuelos.
"Me siento bien por esta tradición y me siento bien por tener estas tradiciones buenas; mi abuelita es quien me las inculca y me gustan", refirió el niño Juan Manuel Estrada.
"Hace tiempo que venimos y esta es una tradición que no hay que perder la costumbre; nuestros abuelos son los que nos han inculcado los valores y las ideas de seguir las tradiciones", opinó la señora Carmen Solano.
"Venimos cada año y nos gusta mucho, es una tradición que no se debe perder, es muy bonita y sobre todo triste porque es la muerte de Dios nuestro señor que dio su vida por nosotros y no hemos sabido responder y ojalá lo podamos hacer algún día, pues este es el fin", consideró la señora Oliva Orozco.
La coincidencia de los entrevistados fue el bienestar que les inspira el vivir las tradiciones de este periodo de reflexión y que llama a que los ciudadanos sean mejores personas, que no vean estos días solo como diversión sino que se sumen por el rescate de valores que consideran que actualmente se han perdido.