No fue acto de homofobia es un asunto sobre permisos: Maricruz Ontiveros

MORELIA, Mich., 30 de junio de 2017.- Continúa su curso el procedimiento iniciado ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) por la propietaria del restaurante bar Ni Diabla Ni Santa en contra de Maricruz Ontiveros Aguilar, directora de Inspección y Vigilancia, por presuntos actos de homofobia que afectaran la operación del establecimiento.

Ontiveros Aguilar expuso que el pasado jueves 29 de junio acudió a presentar las pruebas correspondientes y requeridas por la CEDH en el caso de los presuntos actos de homofobia que habría cometido en contra de la operación del restaurante bar, ubicado en el Centro Histórico de Morelia; entre éstas, se encuentra la copia certificada del expediente que ante el ayuntamiento tiene el sitio.

Agregó que el expediente especifica que el lugar opera con licencia municipal de funcionamiento de restaurante bar con venta de cerveza, por lo que su horario de cierre es a las 23 horas, pese a lo cual se le ubicado en flagrancia explotando el giro a las 3 horas.

Asimismo, explicó que el titular de la licencia es el grupo cervecero Cuauhtémoc Moctezuma, por lo que sólo el representante legal de la empresa está en condiciones de solicitar al municipio la ampliación del giro para permitir una extensión permanente del horario de funcionamiento. Al momento, acotó, no se tiene registro en la Dirección de Inspección y Vigilancia de la existencia de una solicitud por parte de la cervecera de esta naturaleza.

Por ello, pese a las reiteradas pretensiones de la propietaria de Ni Diabla Ni Santa por tramitar la ampliación del giro ha sido posible dar atención a la solicitud, refirió Maricruz Ontiveros.

La titular de la Dirección de Inspección y Vigilancia de Morelia rechazó nuevamente haber incurrido en actos de homofobia, asistir al sitio en compañía de hombres armados, realizar la verificación de la existencia de cuartos oscuros para la prestación de servicios no considerados en la licencia municipal de funcionamiento u hostigamiento al personal.

Expresó que ello queda evidente al referir que Ni Diabla Ni Santa ha sido objeto por parte del municipio de sanciones económicas o clausura temporal, aunque se detectara la comisión de irregularidades en su operación.

Maricruz Ontiveros aseguró que esto obedece a que se han privilegiado el diálogo, la conciliación y la negociación con la propietaria del restaurante bar, actualmente cerrado por remodelación.