Mantiene Ana la esperanza de encontrar a su esposo desaparecido

MORELIA, Mich., 1 de enero de 2023.- Ha transcurrido un año y dos meses desde que desapareció su esposo en el corredor de la muerte, pero Ana Judith A., no pierde la esperanza de encontrarlo, no busca culpables, pero sí la verdad: dónde está su esposo. Quiere regresarle a sus hijos a su padre.   

José Antonio Andrade es uno de los 582 desaparecidos de Zamora, de quién nada se sabe, no obstante las alertas de la Comisión Estatal de Búsqueda y la denuncia interpuesta por su pareja. 

“He participado en los operativos de búsqueda, pero nunca en uno para encontrar a mi marido.  Me dicen que no pueden hacer búsquedas en Jalisco, y los de Jalisco dicen que no pueden hacer búsquedas en Michoacán…”, declaró la víctima indirecta, dejando entrever que los convenios de coordinación no son tan efectivos como se piensa. 

La víctima es otro taxista desaparecido no localizado, que salió a llevar un viaje al aeropuerto de Guadalajara, pero que se perdió en el trayecto. El segundo caso de la misma línea de taxis, de acuerdo a información revelada por Ana Judith. 

“El día de su desaparición yo hablé con mi esposo muy temprano, después, se fue a recoger a su hermano y se llevó a su primo para no regresar solo; antes de salir de Zamora, pasaron a comer a una marisquería y a las 3:30 salieron para el aeropuerto, una hora después, desaparecieron. La última hora de conexión de su primo Ramiro son las 4:31”, declaró en entrevista. 

José Antonio, recuerda su pareja, era como otros taxistas: dicharachero y platicador, servicial y nunca le externo a Ana Judith A, haber sufrido amenazas. En el momento de su desaparición, no padecía adicciones ni hábitos que lo tuvieran en conflicto con grupos delictivos. 

Además de la evidente fragmentación de la familia. Ana Judith A, ahora es la cabeza de la familia, debe garantizar ingresos económicos para mantener a sus dos hijos menores de edad, para sus estudios y la atención psicológica de ellos, porque tras la desaparición de José Antonio, la hija menor comenzó a experimentar problemas de salud. 

“Al principio se veía mal, se enfermaba mucho, tuvimos que llevarla al psicólogo para resolverlo”, declaró. 

Pero el paso del tiempo y la terapia no han sido suficientes. La relación entre José Antonio y su pequeña era muy cercana, pasaban tiempo de calidad juntos. Por lo que su ausencia sigue lastimando a la niña de seis años. Pregunta constantemente sobre su paradero y también cuándo volverá. 

Sin embargo, el cuándo podría demorar, ya que no hay avances de las investigaciones. Las únicas pistas, un IMEI de celular no funcionó y las comisiones de búsqueda se niegan a hacer lo suyo, porque no hay certeza de qué lado fue desaparecido: Michoacán o Jalisco. 

“No hay ningún avance, absolutamente nada, el Ministerio Público me dijo que se había encontrado una última ubicación en Guadalajara, después me dice que va a mandar solicitar algo con lo del teléfono, pero el IMEI no servía, era la única esperanza, pero no arrojó nada. En resumen, no tenemos absolutamente nada…”, dijo notoriamente conmovida por la ausencia de José Antonio.

En Zamora hay 465 hombres y 117 mujeres, de acuerdo a las cifras oficiales de la Fiscalía General del Estado. 582 familias que esta Navidad probablemente no van a celebrar, como Ana Judith el año pasado, que ante la ausencia de su esposo, decidió no celebrar.