La vinculan a proceso por presuntamente degollar a su hijo, en Uruapan
MORELIA, Mich., 7 de agosto de 2020.- Este viernes, un juez de control vinculó a proceso a una mujer originaria de Zamora quien, presuntamente, degolló a su hijo el pasado 4 de agosto, en la colonia Fresno, de Uruapan.
El Ministerio Público local expuso a la juzgadora Martha Magali Vega los datos de prueba inicial que incriminan a la mujer detenida, testigos visuales del infanticidio y quienes llevaron a cabo su detención, tras haberla sorprendido con el bebé en los brazos y un cuchillo en la mano.
Era un día ordinario en apariencia. El martes muy temprano, la familia formada por la persona imputada, Salvador C., y su menor hijo se despertaron y enseguida salieron con dirección a una casa de la colonia El Fresno, porque ambas familias convivían de manera regular.
Eran las 18 horas, los suegros se encontraban en su tienda de abarrotes y la persona imputada junto a su pequeño, de dos años, en el jardín trasero de la casa. El suegro la observó de lejos, hablándole al niño, sosteniéndolo amorosamente entre sus brazos, sin notar alguna conducta agresiva.
El abuelo, Salvador, volteó la mirada y en un instante, vio a la persona imputada tomar un cuchillo y atacar al niño, una y otra, y otra vez, directo al cuello, mientras la sangre le brotaba a borbollones, ahogándolo, silenciando su llanto.
¡Ayuda! -gritó el suegro- y en seguida este con su esposa le quitaron al menor agonizante.
Durante el forcejeo, la presunta victimaria intentó degollarse con el cuchillo, a la vez que gritaba: “¡me quiero morir con él!”.
El móvil del crimen, en caso de que se trate de un homicidio simple, no se conoce. La fiscal no logró establecer una causa. En cambio, sí convenció a la juez para que se desestimara una posible discapacidad psicosocial o inimputabilidad.
Y es que la defensa pública tampoco aportó datos de prueba que pudieran echar para atrás la supuesta duda razonable, con todo y que sí había sospecha de un problema de salud mental, pues el marido de la detenida así lo refirió al Ministerio Público. Ella se había quejado de “los nervios”, pero no había sido tratada.
Por lo anterior, la juez determinó vinculación a proceso y prisión preventiva oficiosa por el tiempo que dure la investigación, que será de cuatro meses.