En 2022, se registraron 5,324 ataques contra mujeres en Michoacán
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MORELIA, Mich., 7 de marzo de 2023.- Michoacán llega a conmemorar la lucha de las mujeres por una vida libre de violencia con un total de cinco mil 324 víctimas de homicidio doloso, feminicidio, ataques sexual, lesiones, violencia doméstica y digital que dejó el año pasado, cifra que no debe de considerarse como la última, sino como la mínima, ya que las estimaciones de cifra negra de los delitos motivados por la condición del género ronda 99.9 por ciento, es decir, se denuncia menos del uno por ciento.
El reporte anual de la Fiscalía General del Estado (FGE), refiere que en la entidad se confirmaron 37 homicidios de mujeres tipificados como feminicidios y 243 homicidios dolosos, lo que dejó un total de 280 mujeres muertas y un número indeterminado de huérfanos, cuyo destino se ignora, ya que en Michoacán hay gran cantidad de hogares donde la cabeza de familia es la mujer.
Y si bien podría pensarse que son pocos el número de mujeres asesinadas con relación al de hombres, existen otros delitos penales en donde se nota más claramente la tendencia de ciertas violencias contra las mujeres más que con los hombres, con base a las denuncias recabadas por la propia Fiscalía.
Por ejemplo, de las 700 denuncias de abuso sexual, 619 eran mujeres y 81 varones, delitos donde la mayoría de los victimarios son personas del primer círculo cercano a la víctima; papá o padrastro, tíos, hermanos, abuelos o profesores.
La tendencia del acoso sexual no fue diverso, de las 195 denuncias recabadas por este delito, solo siete corresponde a víctimas hombres, el resto, mujeres; en lo que refiere a hostigamiento, el 100 por ciento de las víctimas fueron mujeres. Iguales circunstancias es en cuanto a violencia digital y sus ocho carpetas de investigación iniciadas.
En cuanto a violación y tentativa de violación, la suma es de 610 querellas interpuestas ante la representación, 546 de las personas denunciantes fueron mujeres.
La violencia doméstica, una de las más recurrentes en la entidad y que ha dejado de ser privada poco a poco, dejó un saldo de mil 632 denuncias con mil 305 mujeres víctimas, forma de violencia que va más allá de unas cachetadas o mentadas de madre, si no que obliga a sus protagonistas a recapitular y cambiar drásticamente su vida cotidiana.
Las personas víctimas de violencia doméstica se ven obligadas a dejar la casa que conocían como hogar, a vivir con sus familiares, a pedir órdenes de protección y bajo el miedo de que aparezca nuevamente el agresor; los hijos sufren daños permanentes en su bienestar psicológico, además de que suelen tener problemas económicos por la perdida del ingreso del agresor.