Recuerda la UMSNH a Morelos
MORELIA, Mich., 29 de septiembre de 2017.- La Casa de Hidalgo es y será siempre Cuna de Héroes y Crisol de Pensadores, ya que tanto José María Morelos, como muchos otros mexicanos ayer y hoy siguen sacrificando sus ideales e intereses particulares en pos de un bien mayor: la paz y libertad de México, manifestó el director de la Facultad de Biología, Carlos Armando Tena Morelos como orador oficial de la Ceremonia Solemne en honor del CCLII Aniversario del Siervo de la Nación.
De acuerdo a un comunicado de prensa, reunidos en el Aula Mater de este insigne mexicano, vale la pena recordar que José María Morelos tuvo una infancia precaria en la que tuvo que sostener a través de los trabajos en el campo a su madre y su hermana –narró el orador- luego de su paso por el Colegio de San Nicolás Obispo para aprender gramática y latín, dictó cátedra en la Ciudad de México, para ordenarse como sacerdote antes de los 30 años y ejercer su ministerio en Carácuaro, Nocupétaro y Churumuco.
A los 40 años de edad fue llamado por quien fuera su maestro, Miguel Hidalgo y Costilla en Charo para tomar las armas, lo cual no dudó ni por un instante, pese a que después de tantos esfuerzos personales Morelos había conseguido una realización como docente, sacerdote y podía cumplir económicamente con la manutención de su familia además de no estar muy al tanto de la conspiración independentista, de acuerdo a los historiadores.
Éste es un ejemplo –destacó Tena Morelos- del nicolaicismo y del sacrificio del bienestar personal en pos de un bien mayor que en este caso era la soberanía de la Nación y la libertad e igualdad para todos los mexicanos.
El orador reflexionó sobre la personalidad de sólidas convicciones del cura de Carácuaro que por congruencia le mantuvieron hasta el final a defender sus ideales, como mexicano luchador por una causa noble y como persona ante sus convicciones religiosas.
Esa congruencia entre ideales y acciones -puntualizó Tena Morelos- es la que necesitamos los mexicanos de hoy para defender nuestra soberanía, libertad y dignidad frente al concierto mundial.
Medardo Serna González, señaló que al hacer hoy la comunidad nicolaita un solemne homenaje a José María Morelos y Pavón en su Alma Mater, se decidió realizar la quema de tres banderas: la del Colegio Primitivo y Nacional de San Nicolás de Hidalgo, la Escuela Preparatoria Pascual Ortiz Rubio y la Facultad de Odontología como una reflexión de lo que simboliza nuestro Lábaro Patrio.
El movimiento independiente nació con una bandera -dijo el rector- la cual desde 1821 simboliza con sus colores y su escudo los valores por cuya defensa han muerto miles de mexicanos. Valores de libertad, independencia, honor, unidad de un pueblo que quiso ser libre sin olvidar su esencia prehispánica.
Los nicolaitas estamos orgullosos de nuestra historia y este acto simbólico de gratitud al lábaro patrio que presenció tantos momentos de nuestra vida cívica y orgullo académico, busca terminar con una purificación a través de la incineración para que el símbolo de la Patria retorne a la tierra y hunda sus raíces en la Nación.
La coherencia que José María Morelos y Pavón demostró con sus ideales plasmados en Los Sentimientos de la Nación, los llevó a la práctica hasta el último día de su vida, congruencia que le llevó a la muerte por parte de los enemigos de dichos valores, recordó Medardo Serna.
Es por ello que los nicolaitas deben tener presente este ejemplo para comportarse en el presente con una conducta pacífica, respetuosa de los derechos ciudadanos, de allí que ante tomas de calles, marchas y otras manifestaciones de violencia, como rector de esta Casa de Estudios me mostraré siempre, como lo hizo José María Morelos, con una actitud que privilegie la inteligencia, la comprensión, de manera pacífica a la altura de las circunstancias como un deber moral al ser representante de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Institución presente en la lucha independentista de muchos héroes que dieron la vida por un proyecto de libertad, igualdad, justicia social y respeto a la diversidad ideológica.
De esta forma el rector de la Máxima Casa de Estudios invitó a la comunidad nicolaita a seguir el ejemplo de José María Morelos, como estadista, como persona y como parte de esta Centenaria Institución y velar siempre por el bien común.
Posteriormente se procedió a la incineración de las tres banderas antes mencionadas, las cuales fueron entregadas por las respectivas escoltas de las dependencias, para luego recibir de manos de sus titulares: el director de la Facultad de Odontología, Alejandro Larios Trujillo; el regente del Colegio Primitivo y Nacional de San Nicolás de Hidalgo, Aldo Ulises Olmedo Castillo; y el director de la Escuela Preparatoria Ing. Pascual Ortiz Rubio, Jaime Martínez Vallejo, un nuevo símbolo patrio, acompañados del rector de la Casa de Hidalgo, el secretario General, Salvador García Espinosa; y el secretario Académico, Jaime Espino Valencia.
La ceremonia se llevó a cabo en el segundo patio del Colegio Primitivo y Nacional de San Nicolás de Hidalgo, con la presencia solemne de la insigne Banda de Guerra de la Universidad Michoacana, los estandartes de todas las facultades e institutos de la Casa de Hidalgo, directores, funcionarios universitarios, personal administrativo y alumnos nicolaitas.