Jardines de la Unla, entre velas y flores de cempaxúchitl
MORELIA, Mich., 28 de octubre de 2017.- En la que ya es una tradición de atracción turística dentro de la ciudad, la Universidad Latina de América (Unla) celebró su Noche de Muertos, donde la comunidad académica, administrativa y estudiantil colocó 20 altares de muertos en memoria de escritores, científicos y poetas, y algunos a difuntos cercanos a esa casa universitaria que pasaron “a mejor vida”.
Desde temprana hora, los alumnos comenzaron a diseñar la estructura de los altares; pan, sal, frutas, dulces, cigarros, vino, objetos probablemente los preferidos del difundo, cuya fotografía se colocó en el centro, fueron puestos sobre los terciopelos amarillos de las flores de cempaxúchitl. A eso de las 19 horas se encendieron las veladoras.
Un escenario de solemnidad y fiesta invadió los jardines de la Unla, donde el altar monumental fue dedicado a Fernando Pessoa, escritor portugués, debido a que el país invitado de este año es Portugal.
En escenarios morados, metrianaranjados y solitarias tumbas coloreadas por papel picado, en la Noche de Muertos de la Unlano faltó la gastronomía tradicional, música, ofrendas, tapetes de Patámban.
En este culto a los muertos, hubo también exposiciones, eventos culturales y pirotecnia que se ofrecieron a los cientos de asistentes que abarrotaron el lugar, donde el aroma a cempaxúchitl, incienso y veladora, abrigaron la brisa invernal que se dejaba sentir entre los dientes.