Acelerará Lunes negro crisis económica de Michoacán en 2024: economista

MORELIA, Mich., 6 de agosto de 2024.- La jornada del Lunes negro desató una tormenta financiera global que expuso la vulnerabilidad del sistema financiero internacional, y hace advertir un panorama complejo para el desarrollo económico de Michoacán en lo que resta del año.
Así lo expuso el economista Heliodoro Gil Corona, al señalar que la caída abrupta de los mercados bursátiles, con el Dow Jones y el Nasdaq perdiendo 2.6 por ciento y 3.4 por ciento, respectivamente, subraya como indicadores económicos negativos pueden provocar pánico entre los inversionistas.
El descenso de las principales tecnológicas, como Nvidia, Apple y Tesla, acentuó la preocupación. Este colapso se debió principalmente a un bajo crecimiento del empleo en Estados Unidos y al aumento de la tasa de desempleo, que subió al 4.3 por ciento, el nivel más alto desde 2021.
En entrevista con Quadratín, con relación a las consecuencias que esto tendrá en la entidad durante el corto plazo, el especialista refirió que esta situación acelerará el deterioro económico de Michoacán en 2024, en los fundamentales: menor crecimiento económico, achicamiento del mercado laboral y mayor vulnerabilidad de las finanzas públicas.
Cabe agregar que el deterioro económico se relaciona con una situación prolongada de recesión económica, con sus efectos asociados de desempleo, cierre de empresas y descenso del consumo y de la inversión.
En opinión de Gil Corona, estas señales han intensificado los temores de una posible recesión en el país vecino. En México, aunque la Bolsa Mexicana de Valores limitó la contracción a solo 0.89 por ciento, el peso mexicano cerró la sesión en 19.39 pesos por dólar, el nivel más alto desde marzo de 2023.
Este fortalecimiento del peso, en parte una respuesta a la aversión global al riesgo, contrasta con los desafíos económicos internos que enfrenta México. El país presenta una desaceleración en el consumo y la inversión, con datos que muestran una contracción en el consumo privado y una disminución en la inversión productiva.
En su análisis, Gil Corona señala que estos factores, junto con la presión inflacionaria y el riesgo de debilitamiento de las exportaciones y la inversión extranjera, crean un panorama económico complejo para México.
A nivel macroeconómico, el PIB mexicano creció un 2.2 por ciento en el segundo trimestre del año, pero el escenario sigue siendo incierto. La inflación, impulsada por la depreciación del peso y el aumento de precios en productos y servicios, se perfila como un desafío adicional.
A su decir, las políticas fiscales y las reformas constitucionales también jugarán un papel crucial en la estabilización de la economía.
En este contexto, advirtió que es fundamental que tanto hogares como empresas estén atentos a los precios clave de la economía y la paridad peso-dólar, ya que estos elementos serán determinantes para las decisiones económicas en los próximos meses.