El Moso sale a hombros en Lagunillas; Omar Villaseñor corta una oreja
MORELIA, Mich., 6 de octubre de 2024.- Cielo encapotado, tarde nublada y buena asistencia en la Plaza de Toros Cristo Rey de Lagunillas, Michoacán, para el mano a mano entre Omar Villaseñor y Emiliano Villafuerte el Moso, quienes tuvieron que lidiar con un encierro reservón y manso de San Maximiano, al que le buscaron la condición sin encontrar la réplica que se necesita para las grandes faenas.
El Moso se alzó como el gran triunfador al recibir un apéndice de cada uno de sus dos bureles, por lo que al final fue paseado a hombros ante el gusto del respetable que había llegado con ganas de pasarla bien. Omar Villaseñor, con un estoconazo hasta los gavilanes, le cortó una oreja al abre plaza y saludó en el tercio por lo hecho frente al tercero de la tarde, al que le metió la espada en todo lo alto, pero el de San Maximiano se amorcilló.
OMAR VILLASEÑOR
A veinte años de su toma alternativa, aquella noche del lejano 2 de noviembre del 2004 en la Plaza de Toros Monumental de Morelia, en que tuvo como padrino a Jorge Gutiérrez, completó el cartel Pablo Hermoso de Mendoza, el diestro moreliano y médico veterinario zootecnista Omar Villaseñor inició su etapa de despedida. Lamentablemente los toros de San Maximiano no se prestaron para el lucimiento. El torero intentó, logró tandas meritorias y le cortó un apéndice al primero y perdió con el acero otro que tenía ganado.
EMILIANO VILLAFUERTE
A escasos 5 años de su alternativa como matador de toros, habida cuenta que se doctoró el 21 de abril de 2019 en la Plaza Silverio Pérez de Texcoco, apadrinado por Arturo Macías y con Jesús Duque como testigo, El Moso ha toreado muy poco, entre otras causas porque se atravesaron los años de pandemia. Licenciado en administración de empresas, insiste y persiste a pesar de las circunstancias. Ahora en Lagunillas llegó con deseos, empero tampoco tuvo suerte con su encierro, estructuró tandas de buen calado y le cortó una oreja al segundo y otra al cierra plaza.
DEBUT Y COLOFÓN
Una vez concluida la corrida de matadores, debutó vestido de luces el joven moreliano Luis Cincire ante un eral de San Maximiano. Su labor muleteril la comenzó de rodillas, después dejó ver detalles de lo aprendido con el matador Jacobo Hernández. Mató de estocada. Y recibió una oreja que paseó gustoso. Así sea.