A un año de la tragedia del Chapecoense
MORELIA, Mich., 28 de noviembre de 2017. – Este martes se conmemora un año de una tragedia que unió al mundo del futbol, un momento sin duda oscuro y empapado de lágrimas en la historia del balompié. Aquella noche del 28 de noviembre de 2016 el Verdao se alistaba para escribir uno de los capítulos más ilustres en la historia del deporte más popular del mundo y el más brillante en sus cortos 44 años de existencia.
El club tenía escasos 3 años en la Serie A del Brasileirao después de ascender contra todo pornóstico se mantuvo en la parte alta de la tabla de la mano de su ariete Bruno Rangel quien con sus 31 dianas llevo al Chape al máximo circuito carioca.
Esa noche el Vuelo 2933 de LaMía que partió del aeropuerto internacional Viru Viru y estaba programado para aterrizar en el aeropuerto internacional José María Cordova de Colombia para que se librara la primera batalla entre el sorpresivo cuadro brasilero y el Atlético Nacional que venía de ser campeón de la Copa Libertadores 2016 en un encuentro que prometía romper los paradigmas que condicionan a una final inédita por todo lo que lo aderezaba. Sin embargo, el destino fue lúgubre y tuvo unos planes distintos para 71 pasajeros entre los que se encontraban los guerreros que representaban al club, relatores, crónistas, periodistas de Tv Globo, Fox Sports Brasil y varias radios.
La nave se estrelló en Cerro Gordo, a solo 5 minutos o 17 kilómetros de su destino, hecho que generó más nostalgia aún en el combinado de Chapecó Santa Catarina.
Al incidente sobrevivieron Ximena Suárez y Erwin Tumuri de tripulación, junto con el periodista Rafael Henzel; mientras que por parte del equipo Allan Ruschel, Jakson Follmann y Hélio Nieto, además del guardameta Marco Danilo quien falleció horas después al ser intervenido quirúrgicamente de sus heridas y a quién se le debe el pase a la final tras una impresionante actuación en el partido de vuelta contra San Lorenzo, donde mantuvo su arco en 0 a pesar de las constantes ofensivas del ciclón.
Sin duda, los años pasaran pero la tragedia no se borrara y esos guerreros que fueron capaces de forjar una historia y demostrar que en el futbol el dinero y los hipotéticos grandes nombres no lo son todo nunca desaparecerán de la indeleble memoria del futbol.