Trabajar la pasta de caña, arte viva del Siglo 17 en Pátzcuaro

PÁTZCUARO, Mich., 19 de julio de 2017.-  José Juan Martínez Reyes tiene más de 30 años elaborando artesanías basadas en pasta de caña, sobre todo con motivos religiosos. Utiliza las técnicas prehispánicas y españolas ya ancestrales.

Más que un artesano, José Juan se considera un artista. Todo el proceso es muy cuidado; se eligen las varas de maíz con ciertas características, se tratan, se procesan, se prepara para pintarse bajo una técnica del Siglo 17.

Hay de dos tipos de vara; la de paso y la de riego, hay que escogerla. Prefiere la cañas gruesas, las que no estén podridas, las trata para dejarla libre de polilla, lo que garantiza la calidad, "si no sabemos curar, no sirve para nada", manifiesta ante los medios.

Explica que la pasta de caña es casi exclusivamente para el arte sacro, usarla para otras cosas es casi inútil. Dice que tarda de tres a cuatro meses para realizar un Cristo de unos 35 centímetros, hay Cristos para ornato y Cristos para culto, estos últimos son más grandes y puede  y tardarse hasta un año. Los costos para los Cristos de ornato oscilan de 15 a 17 mil pesos y los más grandes hasta 100 mil pesos, explicó el artesano.

Cuenta que aprendió en Pátzcuaro, en la Casa de los Once Patios, después se preparó bibliográficamente durante años.

Dice que les da un curso a 10 personas, "se requiere enseñar para que no se pierda esta técnica, si de 10 sale uno que lo haga bien, ya es ganancia" manifiesta.

Recalca que es una técnica en peligro, dice que aunque hay otros dos o tres artesanos más en la zona de Pátzcuaro que trabajan la pasta de caña, no han depurado sus técnicas, "¿a ver? pídales que les dejen entrar a su taller", señala retador.

Finalmente José Juan Martínez señala que usualmente le compra gente rica y creyente, "y aunque no lo sean se lo llevan por el arte, saben apreciar el trabajo".