La Voz de un Sueño, me sacó de mi zona de confort: Mario Zaragoza
MORELIA, Mich., 22 de mayo de 2018.- "Sentí mucha presión porque me sacaron de mi lugar de confort al pedirme que hiciera un personaje al que no estaba acostumbrado", señaló el actor mexicano Mario Zaragoza en referencia al papel que realiza en la película La Voz de un Sueño que se presentará en las salas de cine a partir de este viernes 25 de mayo.
El actor manifestó que llegó a la película por una invitación hecha por la directora Ana Ley y también por el productor Nacho Martínez Casares.
Explicó que cuando lo llamaron para el casting, le pidieron que hiciera un personaje al cual no estaba acostumbrado y lo pusieron contra la pared, "me sacan de mi lugar de confort y arbitrariamente me presionan; me dicen que sí pero que lo tengo que hacer y lo tengo que hacer muy bien porque es un personaje empático con los buenos y los malos de la película", externó.
"Esta metáfora de lo que fue mi llegada a la película la planteo porque eso sentí, mucha presión", indicó Mario Zaragoza, quien explicó que no estaba acostumbrado a una situación así, "yo lo he hecho muchas veces, pero no estoy acostumbrado a que me lo digan así, de hacerlo bien", expresó.
Reconoció que finalmente esa presión sirvió para que su personaje quedara muy bien, y externó que es uno de los más queridos por el público, "me da mucho orgullo, porque sí lo aprecian, me da una satisfacción muy grande".
El personaje, sin tener la gran cantidad de escenas y de textos, tiene que hacer que el padre de la heroína entre en razón, dijo, por lo cual es empático con ella. Expresó que es una lucha de egos de los dos, padre e hija, porque ella quiere luchar por su sueño de llegar a tocar en público la música que quiere, y él, su padre, quiere que haga lo que él hacía, es decir, trabajar el cobre.
Mario Zaragoza aseveró que ya varias veces ha trabajado en Michoacán, la última vez antes de este filme, dijo, trabajó sobre un tema que no gusta mucho y que sucede en nuestro país, el tema de trasiego de drogas, de mariguana, en un cortometraje grabado cerca de Nueva Italia.
Antes, dijo, vino a trabajar en una historia de migrantes, y la primera vez que estuvo en Morelia fue entre los años 80's y 90's; participó en una obra de teatro de Día de Muertos, una obra de Alejandro Aura que se llamaba El Muerto Vivo, donde fue encargado de abrir un féretro, "en ese tiempo era yo estudiante de cine", aclaró.