Digna de estudio, actividad neuronal de músicos cuando tocan una pieza
MORELIA, Mich., 21 de noviembre de 2017.- Lo que sucede en el cerebro de un intérprete de música, con independencia del género de la pieza, cuando se enfrenta a una creación conocida, a una melodía nunca antes ejecutada, a una canción inacabada, es parte del objeto de estudio de la actividad neuronal de los artistas y cómo enfrentan estos los diferentes escollos que se les presentan, coincidieron Julio Luis Toro, flautista venezolano, y Ricardo Gallardo, director del ensamble Tambuco.
Durante la realización del Café Científico, evento realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) campus Morelia en el Centro Cultural UNAM, en el cuarto aniversario del programa de divulgación de la ciencia y la tecnología, los músicos destacaron la necesidad de efectuar el análisis de la actividad cerebral cuando se enfrenta a la interpretación de una pieza en diferentes circunstancias.
Ricardo Gallardo destacó que la ejecución de una melodía en algunas condiciones, como ante una partitura que no marca los tiempos, puede ser para el artista semejante a la práctica de deportes extremos.
En el foro organizado en conjunción con el Festival de Música de Morelia (FMM), Ricardo Gallardo mencionó que la secreción de neurotransmisores observada en los creadores es similar a la que se detecta en la realización de actividades de riesgo y compromiso físico, lo que permite estimar la presión que puede llegar a implicar para el intérprete.
"Qué pasa con el cerebro sometido a la tensión de la interpretación musical, eso es lo que se pretende dilucidar", reiteró Julio Luis Toro.
El flautista rememoró la interpretación de una pieza que le demandó esfuerzo considerable, debido a que pese a la práctica constante, no logró resultados favorables a causa de la sobre estimulación del sistema nervioso por el ejercicio de la ejecución.
Anécdotas, chistes y creencias en torno de la química del cerebro del intérprete de música fluyeron entre los músicos convocados y el público congregado en el Centro Cultural UNAM para celebrar el cuarto aniversario de Café Científico.
