Artesano de Tócuaro cambió giro por no vender lo suficiente
PÁTZCUARO, Mich.,1 de abril de 2019.- Eliseo Castillo, un artesano de Tócuaro que hace tiempo hacía máscaras, ha cambiado ya el giro porque "no se venden tanto ahorita", dice a Quadratín mientras atiende a un turista en el pueblo mágico de Pátzcuaro.
"Lo que estamos haciendo más que nada es este trabajo, como la Danza de los Viejitos, las guarecitas de Janitzio, los corazones, ese armadillo y el pescado", explica el artesano mientras señala unas piezas que sobresalen en su tendido.
"Es lo que hay ido saliendo, porque la máscara nosotros tenemos tiempo que no lo hacemos", reconoce, y explica que hacen máscaras sobre pedido. Cuenta que uno de sus hijos hace mascaras "como de dioses y esas las mandan hacer los que vienen de Estados Unidos, y ellos son los que se las llevan para allá".
Por lo regular se sitúa en uno de los portales de la plaza principal de Pátzcuaro, es decir, la de Vasco de Quiroga, ahí aprovecha el flujo de turistas para ofrecer sus productos de madera. Entre ellos destaca un armadillo ganador del primer lugar del concurso artesanal de Michoacán en el 2018.
"Todo esto es un nuevo trabajo que nosotros empezamos", dice. En Túcuaro, explica, hay personas que se dedicaron a tallar muebles, empezaron a hacer máscaras, pero han bajado mucho su venta, reitera, y asegura que mejor se dedican a tallar muebles.
Para el armadillo de campeonato, su hijo tardó cuatro meses en hacerlo, él lo asesoró en hacer algunas piezas pero realmente el trabajo minucioso se lo hizo el joven. "Es una sola pieza de madera tallada, era una raíz", expone.
El hombre de 77 años se ve orgulloso del trabajo realizado y de sus hijos. Presume un pez de madera que también lleva un trabajo minucioso; uno de sus hijos lo trabajó durante dos meses.