Aprender a dibujar para dominar el arte del bordado
PÁTZCUARO, Mich., 30 de octubre de 2022.- Cristina Barriga es una artesana del bordado en Santa Cruz, Tzintzuntzan, quien tiene en este oficio unos 40 años. Aunque bordar es su manera de hacerse la vida, antes tuvo que aprender a dibujar para poder llevar a cabo sus trabajos que reflejan la vida diaria de la comunidad, y que pertenecen a la marca colectiva Bordados de Santa Cruz Tzintzuntzan.
No es como suele decirse, que el oficio lo aprendió de los padres. En este caso, lo aprendió en la escuela. "Lo aprendí en la primaria, llevaban unos cuadritos de esos que uno compra y ahí empecé a rellenar. Hay una puntada que se llama 'nudo', y esa me la enseñó una amiga, y así fue como fui aprendiendo", expresa.
Pero antes de hacer bordado, hay que saber dibujar, aclara la artesana. " Yo no sabía dibujar, y entonces a quien dibujaba le pedía de favor, pero luego, al ver que no se daba uno abasto, yo empecé a aprender a dibujar y a bordar", recuerda la mujer.
Cuenta que empezó a bordar entre los 10 y los 12 años, y ya "de lleno" como a los 18. Ahora pertenece a la marca colectiva Bordados de Santa Cruz, la cual integra a una 54 artesana de esa comunidad.
Las otras artesanas que no están en la marca colectiva siguen trabajando, pero no quieren ser parte, explica. "Como que dicen: 'yo con la etiqueta o sin la etiqueta vendo lo mismo', pero nosotras nos hemos dado cuenta de un tiempo para acá, que ver una prenda con la etiqueta les da (a los clientes) mucha confiabilidad de comprarnos la prenda, a diferencia de la que no tiene, y las que no se quieren integrar, pues no se les obliga, pero ellas lo siguen haciendo (bordar)".