Almas rotas, un viaje complejo y delicioso
PÁTZCUARO, Mich., 12 de febrero de 2020.- Almas rotas, segundo largometraje del director moreliano Juan Pablo Arroyo, se graba en locaciones de Michoacán, tales como Morelia, Pátzcuaro y Zacapu. "Es un viaje complejo y delicioso", señaló la actriz Daniela Zavala, quien lleva uno de los protagónicos.
En una rueda de prensa realizada en el pueblo mágico de Pátzcuaro, Juan Pablo Arroyo expuso que filmar en esa ciudad lacustre le gusta porque es una mezcla de amabilidad y belleza, un verdadero set fílmico, por lo que se dijo honrado y agradecido. Morelia también les abrió las puertas.
La razón de filmar en Zacapu, explicó el director, fue porque se sintió motivado por una parte de su propio pasado, porque la historia fue creada por él mismo sin ser autobiográfica. Relató que cuando era niño pasó mucho tiempo en la hacienda Buenavista, muy cercana a Zacapu, y ahí pasaron muchas historias, y no grabó ahí porque ya está en malas condiciones, pero en los muros quedaron los recuerdos y la perpetuidad que quiso lograr a través del filme.
La historia gira en torno al Julián, un hombre que tras la muerte de su pequeña hija decide realizar un viaje, el cual no tiene un destino ni una aparente razón, por lo que deja a su pareja destruida con un hogar abandonado. A su regreso, 10 años después, encuentra a María con Santiago, un escritor, y a partir de ahí se sigue nutriendo la trama.
Director manifestó que "hay que vivir el presente", en relación al futuro del filme; primero hay que terminarlo", acotó y dijo que se llevó cinco meses preproduciéndolo, apoyado de la directora de fotografía Anna Soler y por el actor Silverio Palacios. Fue un mes de rodaje y, de este tiempo, una semana se llevaron en Morelia, otra más en Zacapu, y dos más en Pátzcuaro.
Explicó que de postproducción se llevarán entre tres y cinco meses. Se dijo confiado en que su nuevo largometraje va a llegar lejos. Dijo que no han parado ningún día de trabajar; "es una chamba laboriosa y hay que estar buscando, buscando y buscando", expuso, y adelantó que les tomará un año en total con todo el proceso.
Por su parte, Silvero Palacios manifestó que para ser cine nacional debe suceder en todas las latitudes del país, buscar las historias dignas de ser contadas en cualquier lugar. Ahora le toca a Pátzcuaro. Expuso que él apoyó en la creación de personajes, y dijo que como actor hicieron buena mancuerna con el director, algo que no siempre sucede. Manifestó conocer al elenco porque algunas veces han compartido set y en esa confianza ha sido el trabajo.
A su vez, la actriz Daniela Zavala, quien da vida a María en Almas rotas, dijo que para ella actuar es un salto al vacío, pero bien cobijado por personas como Juan Pablo y Silverio. Expuso que ellos, como actores, ya tienen herramientas, las han ido adquiriendo, y a lo largo de las filmaciones también van aprendiendo otras más.
La actriz explicó que recibió el guión de esta película en octubre y le movió mucho, vio algo en este proyecto de filme, personajes tridimensionales y profundos, pero con un impulso de vivir y seguir adelante.
"Las relaciones están muy jodidas, lo cual es bueno en el cine como experiencia actoral", indicó la actriz, quien buscaba algo que le removiera, y esto lo tiene.
Para el actor originario de Jalisco, Andrés Montiel, quien interpreta a Santiago, el cine es una suma de voluntades. En este sentido, manifestó que lo que están viviendo dentro de la filmación de Almas rotas no sucede muy a menudo en el cine mexicano, que se genere un equipo de una gran calidad humana, lo cual agradece, en especial al director.