Acaparadores pagan a creadores lo que quieren, no lo que vale: artesano
SALVADOR ESCALANTE, Mich., 19 de julio de 2017.- Dentro del recorrido por distintos talleres artesanales de algunos pueblos mágicos de Michoacán, tocó el turno de visitar el taller de trabajo en cobre 'Ángel', situado en el Pueblo Mágico de Santa Clara del Cobre, donde el artesano Arturo Ángel Punzo retoca sus piezas lejos del centro.
El artesano señala que de alguna manera estar lejos del centro de Santa Clara del Cobre le ha costado esforzarse más porque se encuentra fuera de la vista de los turistas, sin embargo, asegura que sigue siendo una mejor opción visitar los talleres que se encuentran bajo el programa del Fondo Nacional de Fomento de las Artesanías (Fonart), porque pueden encontrar mejores precios.
Ejemplifica con una pieza que tiene al centro de su taller, una olla decorada de manera minuciosa, esa pieza está en alrededor de 60 mil pesos, precio directamente del artesano, "porque una pieza así como esta, un acaparador la da arriba de 100 mil pesos porque sabe de la calidad de la pieza, pero uno como artesano, es para vender directamente al consumidor", indica.
La olla que tiene en exhibición en el taller, dice que le lleva hacerla sobre seis meses en un trabajo diario de más de 12 horas.
Arturo Ángel, quien empezó el oficio artesanal a la edad de los 12 años, ya está cumpliendo 35 años de experiencia.
Explica que antes del año 2000 estaba entre 12 y 14 pesos el kilo de cobre, después subió a 35 y hasta 40 pesos. Hoy en día está entre 90 y 100 pesos el kilo de cobre, "es difícil para uno, si compra el cobre tiene que dar la pieza mas carilla pero no la quieren, los acaparadores le pagan a uno lo que ellos quieren, por eso es mejor vender directamente al consumidor, así les conviene a ellos y a nosotros también, porque uno vende las piezas a como realmente están".
El artesano manifiesta que todos los acaparadores están en el centro del Pueblo Mágico, "en nuestra necesidad tenemos que venderles a ellos".
Cuenta que su taller no estaba como ahora, tan ordenado y organizado, la reestructura es parte de los cambios que lleva a cabo el Fonart, con apoyo incluso del Ayuntamiento de Salvador Escalante; "ya tengo mi tallercito, la tiendita para que llegue directamente el turismo aquí", refiere.