Brenda Flores, la mejor mexicana en los 10 mil metros
MÉXICO, DF., 6 de enero de 2016.- Brenda Eunice Flores Muñoz es el futuro del medio fondo en México. A sus 24 años de edad, sabe lo que es ubicarse en lo más alto del podio en un certamen internacional. Así lo demostró en los pasados Juegos Panamericanos de Toronto 2015, evento que marcó su debut en competencias internacionales de este nivel.
"Estoy muy contenta porque fueron mis primeros Juegos Panamericanos, fue una oportunidad muy grande y única en la vida, la verdad disfruté bastante la experiencia, fue un reto muy importante en mi vida y yo creo que ha sido mi mejor evento hasta el momento. Regresé muy feliz, muy motivada y con ganas de progresar", compartió.
Según un comunicado, decir que fue un golpe de suerte ser la más rápida del continente sería denostar una trayectoria deportiva que comenzó siete años atrás, que si bien no es mucho tiempo, es una muestra más de que el trabajo arduo y la disciplina dan resultados.
Mientras estudiaba en la Prepa 3, Justo Sierra, Brenda Flores se enamoró del atletismo y poco a poco descubrió que sus cualidades eran dentro de las pruebas de medio fondo, aunque confesó que el basquetbol es otro de los deportes que le apasiona desde niña.
Luis Nemer su actual entrenador es quien detonó el potencial de la joven universitaria en Olimpiada y Universiada Nacional. Brenda Flores se convirtió en la rival a vencer en los mil 500 metros planos, después en los tres mil, luego en los cinco mil y finalmente en los 10 mil, pruebas en las que es común verla con el oro colgado.
“Recuerdo mucho que mi entrenador me dijo: ‘En el 1500 lograrás mucho, pero en los 10 mil tienes potencial para llegar a Juegos Olímpicos ¿Qué prefieres, quedarte con lo que ya tienes, donde te sientes cómoda, o intentar algo nuevo?’ La verdad es que no me imaginaba corriendo 25 vueltas, se veía fatal, pero con el tiempo mi cuerpo reaccionó bien y los resultados me han dado confianza”, contó la deportista auriazul.
Combina el deporte con los estudios
Brenda Flores ha demostrado que ser deportista de alto rendimiento no significa estar peleado con los estudios: le faltan sólo tres materias para concluir su carrera en psicología. “No ha sido fácil, el atletismo es extenuante, he tenido que desfasar materias y modificar horarios. Pero no me arrepiento”, dijo la oriunda de Nezahualcóyotl, Estado de México.
Es la preparación académica lo que la mantiene en el máximo circuito de la disciplina, sobre todo en los momentos donde está en la pista. Si bien compite ante otras corredoras, su más grande enemigo es ella misma.
“La psicología me ha enseñado que es en la mente donde se gestan los monstruos más temibles de la personalidad. Antes de correr, hay que luchar contra ellos, domarlos o a veces convertirlos en otra cosa. La preparación física es importante, pero la psicológica antes de cada competencia, también”, admitió.
Son batallas interminables y que por lo pronto lleva marca ganadora. Así lo demuestran el par de oros en los Centroamericanos de Veracruz en cinco y 10 mil lisos. La medalla áurea en Toronto, con tiempo de 32:41.30, es también record panamericano.
Además, el crono de 32:15.26 en los 10 mil de los Mundiales de Atletismo en Beijing, la situó en el lugar 14 de esa competencia y como la mejor mexicana en la historia de los mundiales de atletismo.
