Hay divorcio entre fe profesa y vivida; evangelización no está permeando
MORELIA, Mich., 12 de febrero de 2018.- La feligresía de la Arquidiócesis de Morelia es de mucha tradición, pero hay un divorcio entre la fe que se profesa y la fe vivida, lo que muestra que la evangelización no está permeando socialmente, advirtió el presbítero Oscar García.
“Hay una gran incoherencia; es escandaloso que México, siendo el segundo país con más número de católicos en el mundo, exista tanta violencia, tanta corrupción; eso habla de que los procesos de evangelización no han permeado en la gente y que hay un catolicismo heredado.
“Soy católico porque mis papás eran católicos, pero bueno no es un problema tampoco exclusivos del catolicismo, porque aún los no católicos, también tienen el mismo problema; los de otras denominaciones también; hay un problema de pérdida de valores a nivel general”.
El sacerdote especialista en Sagrada Liturgia consideró que esa pérdida de valores se debe a la globalización en que vivimos que da acceso a todo o casi todo y un niño desde que es pequeño a través de un teléfono celular o una tableta también tiene acceso a todo.
Reconoció que el reto de la Iglesia Católica es encontrar las razones por las que el mensaje de Jesucristo que es de amor no está llegando a la feligresía aunque adelantó que la Iglesia tiene que plantearse cómo transmitir el evangelio a través de las plataformas digitales y los medios de comunicación social.
Consideró el profesor del Seminario Diocesano que aun cuando son más propositivos y flexibles todo tiene un límite y, por eso, además de la fe, hay normas y leyes que llevan implícitas prohibiciones que se deben respetar.
“Si ves rojo, quiere decir alto, que te tienes que detener, no te lo tengo que decir… tenemos que normar nuestra vida y las normas no son para oprimir, al contrario, nos permiten una convivencia más sana entre todos, de otra manera no podríamos vivir”.
Para recomponer la situación es necesario empezar por la célula de la sociedad que es la familia, seguir transmitiendo los valores humanos, los valores cristianos, ser honestos y responsables desde el área en cada quien se encuentre.
Sin embargo, reconoció que es complicado porque actualmente todo se quiere obtener de manera fácil y, como ejemplo, en su templo, el de Santa Rita de Casia, les ha dicho a los padres que van a tratar de hacer un verdadero proceso de catequesis, pero los papás le contestan que para qué tanto si con una platiquita es suficiente.
“Ya no se trata de una platiquita, tienen que ser procesos de formación y de compromiso” indicó el sacerdote quien señaló que la salvación eterna no tiene precio aunque la feligresía como la de la Arquidiócesis de Morelia quieran pagarla porque son creyentes de palabra, por tradición, pero no en las obras.