Ilusión democrática/Santiago Heyser Beltrán
Embelesados con el acontecer político, millones de mexicanos acudiremos a las urnas a votar por los mismos, para lo mismo, en el cercano 2018.
S- Así es perro, con las cosas definidas (desde siempre) en el Frente mal llamado “ciudadano” por sus promotores, presidentes de partidos políticos y vividores del erario, el panorama para México se confirma; en el 2018 todo va a cambiar para quedar igual y para ello, dado el deterioro democrático, económico y social que se vive, se hizo necesario, para mantener el estatus, regular la actuación de las Fuerzas Armadas contra los mexicanos, al legalizar su presencia en las calles y sus operativos a instrucción de un solo hombre, el Presidente de México, que por definición será corrupto o inútil, o ambas cosas; me explico:
De ser Meade el elegido, va a gobernar con los mismos para hacer lo mismo, no olvidemos que fue elegido por el Presidente más corrupto de las últimas décadas y que su discurso es de justificación al desfalco a la nación. Si gana el Niño Azul, Ricardito Anaya, llevará de compañero al impresentable PRD liderado por la luchadora de izquierda que invierte en USA en dólares y por un vividor de la política como Dante Delgado, teniendo como mentiroso argumento el de ser “Frente Ciudadano” y enarbolando como bandera la lucha contra la corrupción, pero ojo, llevando como colaborador a Santiago Creel, el que “ofertó” Casinos desde la Secretaría de Gobierno calderonista, en mi opinión un hombre corrupto al que le llegaron al precio. De AMLO, dueño del partido que recibe “cascajo” político, nada que decir, su negocio es perder elecciones y cobrar por ser “el rayito de esperanza” de los desposeídos y así servir de catarsis a quienes son oprimidos, brindándoles, cada seis años, una esperanza de cambio que no les llegará en vida. De los independientes, solo decir que dan pena ajena; Margarita quejándose del dedazo de Anaya, cuando ella es producto del dedazo frustrado de Felipe; al tiempo que señala la corrupción priísta mientras les hace el caldo gordo dividiendo al PAN y atacando al Peje y Lagarto; en adición, sin tener una propuesta de gobierno seria, se queja como plañidera de las reglas impuestas en la legislación electoral a los “independientes”, cuando nada dijo siendo panista, mientras los diputados y senadores azules avalaron el bodrio legislativo que hoy regula la pseudodemocracia mexicana… ¿Y El Bronco, Apá?, en mi opinión otro payaso al servicio del PRI (Felipe y Chente fueron primeros), cuya función es hacer ruido, entretener al respetable y cobrar favores con impunidad en su desastroso gobierno… Conclusión: la farsa del 2018 para nada va a servir a la democracia mexicana, ni al pueblo de México pisoteado por sus congresistas y gobernantes para imponernos un modelo socio-económico de abuso, injusticia, reparto de las riquezas nacionales y esclavitud disfrazada dentro de un modelo de trabajo subordinado que da al Capital las ventajas sobre la mano de obra y al patrón, el control sobre sindicatos de papel, cuando no son verdaderas cuevas de ladrones que cobran por permitir la explotación de sus correligionarios, ¿verdad Robero de Champs?
El primer paso para resolver un problema es reconocer que tenemos un problema; el segundo paso, entender el problema. Pocos son los mexicanos que tienen conciencia del deterioro económico y social que atenta contra nuestras libertades y calidad de vida convirtiendo a los ciudadanos en entes desechables en tanto no sean útiles al sistema que, sostenido en el consumo al infinito, exprime al trabajador enriqueciendo de forma inmoral a una oligarquía que olvida, que todos morimos y que al morir nada nos llevamos y que así, en su vacuidad derivada de una vida orientada a tener y a poseer, está su castigo, al vivir frustrados y con miedo por alejarse de su humana naturaleza: Un país cómo México, donde los pobres tienen hambre y los ricos tienen miedo (cosa de ver autos blindados, guaruras y fraccionamientos amurallados, más la propuesta de Ley de inSeguridad Interior), es disfuncional; a ello añadamos la presión política y económica de aquellos que no siendo mexicanos, anhelan las pocas riquezas que nos quedan después de la traición prianista, que en mi opinión representó la Reforma Energética… Si reconocemos lo descrito, tenemos un problema que es la pauperización de México, donde el problema es ¡El Sistema! con un marco jurídico diseñado para concentrar la riqueza en manos de los poderosos a costa del trabajo de las mayorías; a las que entretienen con migajas y promesas de vida eterna mientras son explotadas.
No hay, en consecuencia, en tanto no nos organicemos de forma inteligente para luchar contra fuerzas que hoy controlan la economía y la política, manera de cambiar el estatus. Solo implementando un modelo de convivencia en donde cada persona, con el fruto de un trabajo honesto pueda vivir con dignidad siendo persona libre, habrá un cambio. Por el momento, incluido el 2018, solo hay de fideo y de jodeo, así de que Ud. hágase tonto solo y vote por cualquiera, porque da lo mismo, nada va a cambiar... ¡Así de sencillo!