Visiones y percepciones/Etelberto Cruz Loeza
VISIONES Y PERCEPCIONES A UN AÑO DEL 8 DE NOVIEMBRE
SE LE CAE EL MUNDO A DONALD TRUMP
Etelberto Cruz Loeza
Donald Trump sigue cuesta abajo.
Ciertamente, Trump tiene sus dos pies muy firmes: uno, el derecho, en el partido republicano – las bases, los militantes – y, el otro, el izquierdo, en sus simpatizantes – cerca de 30 millones de tuiteros que le aplauden todo lo que hace – y en las asociaciones de intolerantes y supremacistas blancos y mientras esté así, podrá pasar su periodo presidencial y no se le podrá mover de esa posición a pesar de todo lo que tenga en contra.
Y precisamente, por estos días enfrenta un fuerte vendaval político nacional e internacional: dos exfuncionarios de su campaña presidencial, Paul Manafort y Rick Gates fueron acusados por el departamento de justicia – entre ellos el FBI - de conspirar contra los Estados Unidos – delito sumamente grave, equiparado a traición - y lavado de dinero. Ambos se declararon inocentes.
Paul Manafort, exdirector de la campaña proselitista de Trump y Erick Gates, uno de sus asesores, son los primeros encausados por Robert Mueller – fiscal especial independiente del departamento de Justicia para el caso llamado Rusiagate, ante la Corte Federal del Distrito de Columbia, en la investigación para determinar si los rusos se coludieron con el entonces candidato presidencial republicano para manipular las elecciones del 8 de noviembre de 2016.
Al mismo tiempo se dio a conocer que George Papadopoulos, otro ex integrante de la campaña de Trump – asesoren asuntos de comunicación -, se entregó a los agentes federales y se declaró culpable de mentir a los agentes federales respecto de sus relaciones y contactos con el gobierno ruso, mas llegó a un acuerdo con el departamento de justicia para recibir una sentencia menos severa por haber mentido a los agentes del FBI.
Papadopoulos fue contactado por los rusos para apoyar en la campaña de Trump, proporcionándole información “sucia” sobre la candidata demócrata Hillary Rodham Clinton. Papadopoulos fue detenido en julio y el pasado jueves 5 de octubre se declaró culpable de mentir al FBI.
Robert Mueller acusa a los ahora ex asesores de Trump de doce delitos. Ambos pagaron una fianza, pero se les recogió su pasaporte y tienen arresto domiciliario. De ser declarados culpables, por lo menos por el delito de lavado de dinero, podrían recibir, cada uno, una sentencia mínima de 20 años.
Es tan consistente la acusación que en Inglaterra se ha iniciado una investigación para saber y conocer si el gobierno ruso intervino, también, en el caso del Brexit y manipuló algunas fases de esta elección, tan determinante para la Unión Europea.
Por lo pronto Donald Trump sigue de bajada.
De conformidad con una de las últimas encuestas – de la cadena NBC y del diario Wall Street Journal – el 38% de los estadounidenses aprobó la gestión de Donald Trump – el nivel más bajo desde el 20 de enero de 2017, al inicio de su administración - , contra un 58% que la desaprueba. Y de conformidad, igualmente con esos dos tradicionales pero impactantes e influyentes medios de comunicación norteamericanos, este indicador es, históricamente más bajo que con cualquiera de sus predecesores en el puesto: Obama, Bill Clinton, los Bush – quien, Bush, padre, declaró que Trump está mal y que el votó por Hillary Clinton Rodham -.
Estas empresas de comunicación realizan un desglose de los indicadores y señalan que el índice más alto de su aceptación fue con el manejo de su imagen con motivo de los huracanes en Texas y en Lousiana y como Comandante en Jefe en los casos de Irak y de Corea delo Note, pero que se desplomó hasta el 33%, con el asunto del tiroteo en Las Vegas, pues no expresó ni una declaración, por sus relaciones con la poderosísima asociación nacional del Rifle, una de las bases de su triunfo en las elecciones de hace un año y, ahora con el tiroteo en una iglesia de Texas y señalar que fue por desórdenes psicológicos y que existían muchos desórdenes de este tipo en el país – y aunque lo compuso casi inmediatamente, “como en todos los países”, y si le sumamos los efectos en su imagen de sus muy cercanos asesores señalados como colaboradores del gobierno ruso, ¡quién sabe hasta dónde baje! ..Se plantean apuestas que podrían estar más abajo del 30% de aceptación.
Curiosamente, el psicólogo forense Bandy Lee, de la escuela de medicina de Yale, ha consultado a 27 especialistas en salud mental para editar el libro The Dangerous Case de Donald Trump, en el que más de coincidir en que a nadie con inestabilidad mental como la del mandatario debieran confiársele poderes de vida o de muerte, como lo que incluye la presidencia.
Bandy Lee organizó una serie de conferencias en las que expertos reconocieron que Trump no es el único presidente en mostrar síntomas de enfermedad mental, pues ya en 2006 un estudio encontró que la mitad de los gobernantes de los Estados Unidos en el pasado sufrían algún trastorno, pero sí es el tp0imero que representa una amenaza significativa ante la cual urge actuar.
Algunas notas distintivas son: HEDONISTA EN EXTREMO, NARCICISTA, MALIGNO, POSEEDOR DE UNA PELIGROSA COLECCIÓN DE LOS MÁS DESTRUCTIVOS SÍNTOMAS PSIQUIÁTRICOS PARA UN LÍDER E INNEGABLE SOCIÓPATA.
Según Bandy Lee este libro existe para cambiar el curso de las conversaciones públicas sobre la salud mental de Trump: pasar de las diatribas y señalamientos de sus locuras, niñerías y payasadas para centrarse en la perpetuación de una normalidad maligna y, con base en los juicios de los 27 especialistas, la salud mental y el comportamiento de Donald Trump no va a mejor si no a empeorar y debe procederse, ya, para evitar escenarios peores, social, nacional e internacionalmente.
Así las cosas, la apuesta está planteada: ¿terminará, o no terminará, su mandato?
¡Cosas veredes, Sancho!