Parákata/Fernando López Alanís
“Parákata” es el nombre de un grupo artístico que tiene como objetivo “Buscar los límites interpretativos entre la música, la literatura y las artes escénicas. Fomentando la lectura y dinamizándola con música; a la par de dar una serie de demostraciones interpretativas de gran calidad musical en los diversos giros del ensamble”. Bueno, así dice, y lo respetamos; pero lo importante es el contenido, lo que pretenden, porque para cumplirlo se encontraron con quien debían: Miguel Salmón del Real, Secretario de Cultura del Municipio de Morelia, quien decidió iniciar con ese grupo un programa popular llamado “Primera Temporada de Conciertos Literarios”, “estampa en llamas”. Y la armaron. Y el experimento dio buenos resultados, excelentes, diría yo, para ser el primero.
En una calle llamada Hidalgo, conocida como la “cerrada de san Agustín”, en pleno Centro Histórico de Morelia, bajo un enlonado y un cielo benigno, un público fijo de unas 75 personas, y un público flotante de unas 200 (al fin “calle”), escuchamos textos de Juan Rulfo (selección de párrafos de “Es que somos muy pobres”, “Las ranas”, “Talpa”, “Luvaina”) ensamblados con música que… ¿que qué? Que de alguna manera se completaba con la literatura rulfiana, y el resultado fue que ¡a la gente le gustó! Y a nosotros también, claro.
Ruego a quien esto lea me disculpe no decir más de la música, pero no hubo programas de mano, y después de una introducción somera del director, Isaac Borges (guitarra), se fueron “de filo” hasta terminar. Ojalá que, si esto prende, y debe prender, los organizadores o los artistas ilustren al público a cada paso sobre lo que le están compartiendo: los objetivos de la difusión cultural se cumplirán más ampliamente.
Me dicen que “Parákata” es una palabra Purépecha que significa mariposa, y bueno, Michoacán es la región de las mariposas, y en particular de la Monarca. El grupo está compuesto por jóvenes estudiantes del Conservatorio Nacional de Música “Las Rosas” (Wendy Celeste, cello; Minerva Hernández, soprano; Lia Alejandra Corona, flautista; Alejandro Acosta, percusiones). Por la lectora Alondra Yunuen Ávalos, de la Universidad Michoacana, y Michel Soto, de la UNAM-Morelia. Y muchas gracias a Héctor Borges, Director de Fomento Cultural, o algo así, por la invitación y la organización del evento. Y pedirle al maestro Miguel Salmón que no baje la guardia, porque éstas son de las actividades que nuestro pueblo necesita. Gracias, y avisen de la siguiente, por favor. Hasta entonces.
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