Resarcir tejido social debe atenderse desde la mediación social
MORELIA, Mich., 27 de mayo de 2017.- Rindió protesta la Asociación para la Resolución de Conflictos (Arco) Capitulo Michoacán, que llevará a cabo las labores de capacitación de individuos, que permitan atender y destensar los problemas, explicó la presidenta de la agrupación en Michoacán, María del Pilar Chávez Blanco.
En entrevista con Quadratín, en el marco de la toma de protesta a los integrantes de Arco Capitulo Michoacán, la presidenta de la asociación admitió que la entidad atraviesa por una descomposición del tejido social que urge resarcir desde abajo, desde la sociedad, es decir, desde las comunidades, las escuelas, los barrios, entre otros sitios, en los que surgen los conflictos.
“Michoacán, como todos sabemos, es un estado con una gran descomposición social, entonces reconstruir el tejido social se reconstruye desde abajo, entonces no podemos reconstruir un tejido socialmente desde arriba, donde ya la persona cometió un delito”, comentó, al señalar que, ante la descomposición del tejido social, debe haber personas que funjan como “mediadores”.
A su decir, la asociación trabaja para llevar la mediación más cerca, a donde más se necesita, reconociendo que la mediación ha estado en las instituciones; a través de la asociación queremos acercar la mediación a escuelas, comunidades, barrios, lugares donde sabemos que surgen los conflictos muchas veces, y como institución, llegan los conflictos ya estallados, entonces queremos trabajarlo de manera más social”.
Arco lleva 10 años conformada como una asociación que trabaja la mediación como alternativa para la resolución de conflictos desde el ámbito social, a fin de reducir que éstos crezcan y desencadenen en estallidos de mayor envergadura que deban ser ya atendidos por instituciones.
La agrupación planteó conformar representaciones en los estados del país, para que éstos capaciten, certifique y evalúen a las personas, a efecto de que funjan como “mediadores”, en los ámbitos sociales donde surja un problema.
“Es un espacio para brindar capacitación, certificación de mediación, para ver los parámetros, los patrones de calidad de las personas que son mediadoras, que puedan tener alguien que les diga, ‘el trabajo que estás haciendo sí está bien hecho’, y que quien quiera capacitarse, tenga un lugar donde capacitarse”, explicó.
En el caso de Michoacán son 18 los integrantes, quienes pretenden llevar la mediación a otros lugares, a través de un modelo de mediación más social; admitió que, en la práctica, las personas no van a las instituciones, por lo que consideró que es necesario que la mediación se acerque a ellos.