OOAPAS no será privatizado: Roberto Valenzuela
MORELIA, Mich., 1 de febrero de 2017.- El Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS) de Morelia no será privatizado, aseveró el titular de la instancia, Roberto Valenzuela Cepeda.
Luego de que el dirigente del Sindicato de Trabajadores del OOAPAS (Staooapas), Rodolfo Rodríguez López, señalara que ante las condiciones económicas adversas que enfrenta al momento la paramunicipal, la respuesta de la administración local es la privatización de ésta, Valenzuela Cepeda señaló que no existe tal posibilidad, ya que la ley no le considera esto en los casos de los sistemas de agua potable.
En contraste, sí admite el ingreso de capitales privados cuando los organismos operadores carecen de los recursos suficientes para desempeñar sus actividades.
Es el caso del contrato por prestación de servicios que el OOAPAS mantiene desde hace once años con las empresas tratadoras de aguas residuales, las que aportaron la inversión para recuperar los líquidos residuales, por lo que el organismo paga la infraestructura y su mantenimiento.
Acotó que aunque Rodríguez López ha lamentado la contratación de una empresa privada para efectuar la actualización del padrón de usuarios, una inversión superior a los 5 millones de pesos para su primera etapa, durante años el Staooapas ha realizado el manejo comercial de los 260 mil usuarios, sin demostrar la capacidad de llevar a cabo su actualización.
Finiquito de los trabajadores, riesgo latente
La privatización del OOAPAS no es una posibilidad que Morelia tendrá que enfrentar, no así el finiquito de los trabajadores, a causa de la incapacidad del organismo de solventar el costo del contrato colectivo de trabajo.
"El verdadero problema del OOAPAS es que su sustentabilidad financiera está en riesgo, no está terapia intensiva, sino en fase terminal", refirió el director del OOAPAS.
Así, el finiquito de los trabajadores es un "escenario presente" en un contexto donde desde el 1 de enero de 2017 el contrato colectivo de trabajo representa un costo de 507 millones de pesos, de los cuales 180 millones de pesos son absorbidos por sueldos y salarios y 237 millones de pesos se destinan a prestaciones.
Aunque las prestaciones son legales y ganadas por la lucha de los trabajadores, no hay capacidad económica para mantenerlas, además de que algunas son onerosas, como el 73 por ciento por concepto de prima vacacional, el pago de 74 días de aguinaldo y el premio de puntualidad.
Expuso que para evitar el colapso financiero del organismo, se debería someter a una contención salarial y en prestaciones real, a diferencia de la practicada en los años 2012 a 2015, cuando lo contenido un año era repuesto al siguiente.
Se precisa que la contención comprenda por lo menos cinco años para obtener un beneficio tangible, agregó Roberto Valenzuela, quien reconoció que se trata de decisiones "duras y difíciles".
Cotos de poder, caudal de inconformidad del Staooapas
El director del organismo aseveró que el tema con la dirigencia del Staooapas sigue siendo la coordinación, que "para el líder significa que yo me deba someter a sus instrucciones, pero eso no va a pasar, aunque así haya estado acostumbrado por 30 años".
Aunque reconoció que los involucrados se encuentran "entrampados" en las negociaciones, aseguró que la dirección está dispuesta al diálogo, siempre que éste privilegie el que el organismo opere y se garantice servicio a la población, "no los intereses del líder o del director, necesitamos sentarnos a dialogar, pero debe haber disposición de ambas partes, desde la dirección del OOAPAS la hay".