El nuncio apostólico no vino preparado y es su primera vez…
MORELIA, Mich., 17 de enero de 2017.- Puntualísimos, a las 18:00 horas, el cardenal Alberto Suárez Inda y el nuncio apostólico, Franco Coppola, subían las escaleras del anexo de la Catedral Metropolitana; atrás, con humildad, venía el nuevo arzobispo de Morelia Carlos Garfias Merlos.
El Cardenal pidió unos minutos para mostrarles a los dos jerarcas de la Iglesia Católica la vista de la Catedral, antes de subir a cumplir su cita con los representantes de los medios de comunicación en la que Suárez Inda daría su último mensaje como arzobispo y Garfias Merlos el primero.
El formato preparado no funcionó porque estaba previsto que cada uno de ellos diera un mensaje, comenzando por el nuncio apostólico, haciendo honor a su nombre confesó que no iba preparado, que apenas unos minutos antes le había dicho que daría un mensaje.
Además, dijo que será la primera vez que asista a una toma de posesión de sede arzobispal como lo es Morelia, un gran presbiterio de entrega de fieles y también de muchos problemas aunque no particularizó en ninguno de ellos.
Agradeció públicamente al cardenal haberlo acompañado durante los primeros días de su estancia en México y a Garfias Merlos haber aceptado el nombramiento de arzobispo que le dio el Papa Francisco.
La segunda parte, preguntas y respuestas, tampoco funcionó porque iba a ser una pregunta para cada uno de ellos pero las tres que se hicieron las contestó quien a partir de mañana miércoles será el noveno arzobispo de Morelia desde 1863 cuando se creó esta provincia eclesiástica.
Luego, Franco Coppola ofició la misa de bienvenida a Carlos Garfias Merlos y después disfrutaron de un concierto con el monumental órgano de la Catedral.