Se acabó el sueño; Brasil vence a México 2-0

MORELIA, Mich., 17 de agosto de 2011.- México no pudo ante Brasil en las semifinales del Mundial Sub 20 y cayó dos goles por cero anta los cariocas que fueron menos que los aztecas en el desenvolvimiento del partido, pero con dos pitazos en la parte final del partido terminó por fulminar a los mexicanos que se casaron de fallar.Al minuto 2 llegó la primera jugada de peligro a favor de Brasil, con un disparo de fuera del área a cargo de Oscar, el casaca 11, que se ánimo con pierna derecha, para que Rodríguez el portero mexicano recostara y la mandara a tiro de esquina.México sin duda estaba desconcertado, como si jugará a otro ritmo mucho más lento que lo que presentaba la verde amárela.Al minuto 11 México reaccionó con un disparo potente de Ulises Dávila, que se fue desviado por el costado derecho de la portería carioca, pero México de a poco equilibraba las acciones dentro del campo.México se apoderaba de la pelota y al minuto 15 tuvo una aproximación más con un balón filtrado para Erick torres el cual fue ganado por el portero brasileño Gabriel, que se llevó un duro golpe al pegar la pierna del delantero mexicano en el rostro del guardameta.El partido era totalmente equilibrado con dos equipos en busca del gol, en una batalla en media cancha de verdadera semifinal.Brasil volvía a tomar el balón generando peligro en la cancha de México con disparos que afortunadamente se iban por encima.México reaccionó de manera inmediata con una llegada peligrosa que generó un tiro de esquina de donde se provocó un rebote para que Orrantia llegara de frente para sacar un potente disparo que se iba apenas por un lado.Al minuto 32 Erick el Cubo Torres dejaba ir la oportunidad más importante cuando le llegó el balón pleno para disparar de primera, sin embargo recortó e intento el disparo con pierna derecha buscando el ángulo.César Ibáñez estuvo cerca de sorprender al portero brasileño con un intento de centro que se convirtió en disparo que estuvo muy cerca de techar al guardameta.Brasil contratacó de manera inmediata en un disparo que buscaba la red, sin embargo Rodríguez congeló el esférico en sus manos.En la parte complementaria México empezó empujando a su rival acorralándolo en su propio campo, siendo un disparo de Rivera de fuera del área la primera de las aproximaciones.México se adueñaba del partido, piñon que ya estaba en el campo, generó hasta en ese momento la más peligrosa con un disparo potente ligeramente recostado hacia la parte derecha el cual llegó a la humanidad del portero Gabriel quien rechazo a saque de banda.Edson Rivera perdonó de manera increíble al minuto 61, tras recibir apenas adentro del área de frente al marco y este se presiona para disparar de manera inmediata regalando el balón al portero.Brasil se notaba preocupado dentro del campo, demostrando cansancio en sus jugadores por lo que antes de llegar al 75´el técnico realizó 2 cambios en busca de fortalecer el medio campo y tener más llegada al marco de México que se había vuelto totalmente olvidado.La portería de México volvió a sentir el peligro al minuto 75 con un centro raso que amenazaba por cruzar toda el área donde ya estaba esperando el balón una casaca amarilla para empujar, pero la mano de Toño Rodríguez se cruzó de manera oportuna.Al minuto 79, Brasil se fue adelante en el marcador cuando México jugaba mucho mejor que su rival, una desconcentración defensiva terminó por matar a los aztecas, en un centro al corazón del área donde en medio de 4 defensores Henrique cabeceó y la mando a guardar para el primer gol del partido.Brasil sentenció y mató a los mexicanos con el segundo gol de Henrique en una triangulación perfecta para deshacer la defensiva mexicana y asegurar su boleto a la gran final de la Copa del Mundo.México murió con la cara en alto, jugando mejor que el rival, lamentablemente una de las grandes fallas es no meterla y en el fútbol gana el que la mete.José Rodríguez, César Ibáñez, Erick Torres, Diego Reyes, Taufic Guarch, De Buen, Jorge Enríquez, Héctor Acosta, Gabriel Silva, Néstor Araujo, Ulises Dávila y Carlos Orrantia.