Hablando en serio
«Kamala no debe ser Presidente»
¿Cuantas moscas son aceptables dentro de un millón de botellas de Coca-Cola?, ¿1,000?, ¿100?, ¿10?, ¿1?... La respuesta es CERO; ni una mosca es aceptable dentro de una botella de Coca-Cola.
¿Cuantos delincuentes es aceptable que entren a USA por cada 100 migrantes ilegales?, ¿10?, ¿5?, ¿3?, ¿1?... La respuesta es CERO y me explico; tomando como dato que durante la administración Biden/Harris han entrado 10 millones de migrantes ilegales a USA, si por cada 100 migrantes hubiera entrado 1 delincuente, hoy estarían dentro de USA cien mil delincuentes, un verdadero ejército que ya está atacando, desmembrando, desintegrando, amenazando y extorsionando a la sociedad norteamericana como fuerza invasora ¡En su propio territorio!, las ciudades de NYC y la Aurora Colorado, entre otras, atacadas por organizaciones criminales como, “El Tren de Aragua”, son testigos de ello.
Y grave, para defenderse del crimen organizado no se tienen ni el presupuesto, ni la estrategia, ni un ejército de militares y/o policías capaces de enfrentarlos y erradicarlos; tampoco de encarcelarlos, de ahí las leyes que no sancionan delitos y que permiten que los delincuentes sean liberados de inmediato (estrategia de puerta giratoria), en detrimento de la paz pública y de la seguridad de los ciudadanos.
Dadas las políticas de fronteras abiertas que permite el ingreso de drogas y la permisividad de delitos de la administración Biden/Harris y de El Partido Demócrata, en mi opinión, hoy los Estados Unidos pelean una guerra que no pueden ganar si no cambian leyes y estrategias, una guerra que México ya perdió, lo que ha permitido que un tercio (o más) del territorio mexicano esté controlado por gobiernos paralelos del crimen organizado que fiscalizan el comercio y definen la economía, además de decidir quién vive o quién muere.
Esta guerra se ha perdido en México y está destruyendo países de Europa, porque no es con ejércitos convencionales, ni con tecnología o gasto militar como se lleva a cabo y lo peor, no se realiza en un campo de batalla; es una guerra que se efectúa en el propio territorio, en las calles de pueblos y ciudades contra ejércitos que se mimetizan con la sociedad civil; ejércitos que atacan en tres frentes, uno, destruyendo el tejido social como un cáncer usando como armas las drogas y un cambio cultural, dos, corrompiendo a la clase política, a los gobernantes y a las policías usando como arma el dinero y finalmente, tres, con agresión abierta a través de grupos delincuenciales organizados que cada vez tienen más recursos, mejores armas, más flexibilidad, leyes a su favor, por lo que rebasan al Estado en su capacidad de defender a la población civil que poco a poco, paso a paso queda en manos del crimen organizado, quienes, como la humedad, se expanden y controlan cada día más territorios.
Por la irresponsabilidad de Biden/Harris y del Partido Demócrata y sus estrategias político electorales, así como por la estupidez de legislar “Ciudades Santuario”, hoy la Seguridad Nacional de USA está en riesgo por lo que se describe como migración ilegal, cuando de facto es una invasión.
En su entrevista con Oprah Winfrey, Kamala Harris declaró que ella y Tim Walz, su candidato a Vicepresidente, tenían armas en casa, la cito: “Soy propietaria de armas, Tim Walz es propietario de armas… Si alguien irrumpe en mi casa, se le dispara… (después de ese arranque de sinceridad, corrige) …Probablemente no debería haber dicho eso…” Kamala maneja un doble estándar, cuando se trata de su casa y familia las defiende y no permite el ingreso de extraños, cuando se trata de la República, a la que juramentó servir y proteger, deja las fronteras abiertas… Por eso, por atentar contra la Seguridad Nacional de USA incumpliendo su responsabilidad ¡Kamala no debe ser Presidente!
Pero, ¿cuál es la solución?, repito lo dicho en otros artículos: No permitir la migración ilegal, no dejar entrar a quiénes no tienen recursos y un medio honesto de vida o una aportación laboral o intelectual que ofertar y obvio, terminar con las “Ciudades Santuario” y con la permisividad de delitos “menores”… Cualquier migrante que cometa un delito, cualquier delito, debe ser expulsado de inmediato, punto.
Pero, ¿cómo cerrar los ojos al sufrimiento humano de quienes huyen de la inseguridad, la pobreza y la violencia en sus países de origen?; en mi opinión, los organismos internacionales y el derecho internacional deben adecuarse e intervenir para resolverlos en sus países de origen, ¡no con migración ilegal!… Es ingenuidad permitir que gobiernos delincuenciales, corruptos o simplemente incapaces expulsen a sus ciudadanos generando problemas a otras naciones, lo que debería tipificarse como delito en el derecho internacional y permitir la intervención de organismos como la ONU; como debería haber una intervención internacional, para castigar o derrocar a los gobiernos que permitan, promuevan o faciliten el contrabando de drogas… El concepto de soberanía nacional, opino, debe ser revisado y adecuado en el Derecho Internacional para evitar que malos gobiernos o gobernantes corruptos, lesionen a sus pueblos y generen problemas a otras naciones… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión
Santiago Heyser Beltrán