Reformas al PJ y órganos electorales, lejos del revanchismo presidencial
MORELIA, Mich., 29 de julio de 2024.- Junto con el guerrerense, Félix Salgado, Raúl Morón, fue uno de esos eslabones rotos, que en el 2021 ahondó la confrontación entre el presidente López Obrador y los órganos electorales.
El encono presidencial contra la autoridad electoral, se arrastra desde el 2006.
En la mente del presidente López Obrador priva la certeza de que fue una elección fraudulenta, un despojo electoral en su contra. Y donde el entonces IFE, el IFE de Ugalde, abonó al cerrado triunfo de apenas 236 mil seis votos de diferencia, el 0.56 por ciento del panista Felipe Calderón sobre el tabasqueño.
Los agravios son un fantasma que un día y otro también, retumban en las mañaneras del presidente en Palacio Nacional.
Así, la deposición de ambas candidaturas, para las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, primero en el INE y posteriormente en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, echaron la suerte del sistema electoral nacional.
En el el 2022, el Presidente puso en marcha el denominado Plan A, una ruta para impulsar la Reforma Política de la 4T, donde se incluía la reconfiguración del actual INE, eliminar la representación proporcional, reducir el número de Diputados Federales de 500 a 300, y Senadores de la República, de 128 a 64, así como el presupuesto para los organismos electorales y partidos políticos, hasta por 24 mil millones de pesos
La iniciativa se envió en abril del 2022, pero se votó hasta diciembre de ese mismo año, pero la falta de votos solo permitió reformas a las leyes secundarias en materia electoral, que finalmente fueron contenidas en el Poder Judicial.
El empecinamiento presidencial continuó hasta el 5 de febrero del 2024, cuando el presidente López Obrador presentó su plan de 18 reformas constitucionales y dos de leyes secundarias, en el marco de los actos conmemorativos del constituyente de 1918. Ya estaba configurando el Plan C.
Pacientemente esperó el desarrollo de la campaña, se metió a la contienda presidencial y apostó a un triunfo de Morena y aliados.
Las horas posteriores al dos de junio, ya apuntaban a la mayoría calificada en el Congreso de la Unión.
Ya nada frenaría el ímpetu presidencial, por ir, en primera instancia, sobre la figura del Poder Judicial y, posteriormente, los órganos electorales.
Raúl Morón será Senador por segunda ocasión. Pero en esta Legislatura, por entrar, la responsabilidad será histórica.
Habla de lo que viene. Afirma que el alegato legal de la oposición no prosperará, que la reforma al Poder Judicial quedará antes de que concluya el obradorismo y que el tema de la mayoría calificada en el Senado de la República, ya está resuelto, sin mayores problemas.
-En los casos de la reforma el Poder Judicial y tema de los órganos electorales, se ve una suerte de revanchismo presidencial-
"Yo más bien creo que está tomándose decisiones en razón de una realidad, que nadie podemos ocultar. El tema es que la impartición de justicia en México es un asunto muy complejo, y fundamentalmente dado a quien tiene dinero, y ese es público, no estamos descubriendo nada, quien tiene dinero, quien tiene posibilidades, tiene justicia y la gente que no tiene dinero enfrenta procesos injustos que lo tienen detenido en la cárcel y en muchos lugares, o que enfrenta o es víctima de este tipo de procesos. Yo lo que creo es que lo que está dándose, el kit fundamental de la reforma al Poder Judicial, es el tema de la elección popular, y esto ya se da en varias partes del mundo, entonces no es algo nuevo, si es algo inédito en México, sí, y la verdad es que ellos, los jueces y magistrados se sienten dueños de ese poder, y actúan en ocasiones con mucha holgura en la toma de decisiones. Yo no veo nada inadecuado en ese asunto, ya los otros poderes son nombrados por la gente, por la sociedad, por el pueblo, por las mexicanas y mexicanos, y no veo porque en el Poder Judicial no puedan ser nombrados.
La estigmatización que están haciendo los opositores, o los argumentos que ellos tienen, a mi juicio no son válidos. Yo estoy de acuerdo en que se nombren por el pueblo, la gente así lo dijo ya, porque la gente votó el 2 de junio por ello, y nosotros tenemos que corresponder a esa decisión que tiene el pueblo de México, entonces, en el caso del Poder Judicial, y en el caso del INE, igual.
Luego recuerda:
"Yo ya fui Senador. Y yo sé cómo se nombra a los consejeros electorales, yo sé cómo se les nombraba"
-¿La cuota partidista?-
"Claro que no, ni siquiera es una cuota partidista, siquiera fuera un asunto de los partidos, tanto los magistrados como los consejeros electorales. No, no, no, son gente que está más arriba de los partidos, que determina quiénes son, porque los partidos obedecen a gente con mucho poder económico, y que no daban la cara y ahora empiezan a dar la cara, con todos los partidos políticos de la oposición, de nuestros adversarios, y quién prácticamente definió quién era la candidata, entonces ese poder está detrás de los partidos, ese es el poder que nombraba, los poderes fácticos eran los que nombraban a los ministros de la Suprema Corte, y son los que nombraban a los consejeros del INE, entonces, ni siquiera los partidos políticos, los dirigentes de los partidos políticos, o los coordinadores de fracciones parlamentarias de la Cámara de Diputados o Cámara de Senadores. No, eran los poderes fácticos, por eso ahora que los nombre el pueblo, eso no tiene mayor relevancia. Y obviamente todos los requisitos de idoneidad que están planteados, tanto para el Poder Judicial como para los consejeros del INE, van a prevalecer, no se tocan.
-¿Ese sería el blindaje, se podría decir?-, se la insiste.
"Sí, y aparte no está acabado, porque hay compañeros que han planteado, que si el Legislativo los va a proponer, sería importante que el Legislativo pueda aceptar propuestas de las universidades, de las barras de abogados. Claro que sí, eso está abierto y sería un proceso como de legitimación de las propuestas que estén a consideración de la gente que va a determinar, del electorado que va a determinar, para que nombren a quien nombren, si están con este proceso transparente que propongan universidades y más. Y que el Ejecutivo, el Legislativo y el Poder Judicial tomen en cuenta esas propuestas, pues claro que van a tener idoneidad y van a saber qué hacer cuando puedan asumir una responsabilidad que les va a asignar el pueblo de México".
Hay muchas cosas que se dicen, que son mentiras, pero creo que no va a haber ninguna dificultad para cambiar de fondo este país"
-La oposición aún apuesta al litigio en el Tribunal. Los acusan de cometer fraude a la ley-
"Yo creo que están buscando, se dice en el argot de las leyes, chicanadas, con las que tratan de deslegitimar el triunfo que tenemos como Cuarta Transformación, como coalición, porque siempre se ha calificado la elección de esa manera"
Morón ve lejano que el argumento proceda y que los números se muevan.
"La ley refiere que el tema de la sobrerrepresentación es por partidos. La sobrerrepresentación máxima es del 8 por ciento, Morena tiene, si no mal recuerdo, el 5 o 6 por cierto, el Verde tiene el 7 por ciento, el PT tiene el 7 por ciento, entonces no llegan al 8% de sobrerrepresentación.
Ellos se están planteando, porque ya si sumas el 7, el 7 y el 6, si te da alrededor del 20 por ciento de sobrerepresentación, entonces es como coalición, pero la ley no dice que la coalición. Habla sobre los partidos políticos, que ninguno puede tener más de 300 legisladores, y Morena no tiene 300 legisladores, tiene 270 y tantos, o sea, todos los criterios constitucionales y legales se cumplen pero ellos obviamente están buscando es deslegitimar el proceso electoral y que la doctora Clara, pese a los votos de la gente. El recurso legal no tiene futuro, porque está totalmente fuera de contexto, fuera de la realidad"
Raúl Morón advierte que descalificar la elección en tribunales generaría un conflicto muy grave, ya sea en el hecho de validar la elección presidencial o poner en riesgo la distribución de los legisladores, de los plurinominalistas con el criterio ese que estaban comentando, de que no sean los partidos sino que sean las coaliciones, o sea, eso la verdad está complejo.
Forjado en la lucha magisterial, Raúl Morón asegura que el tema de las mayorías, tanto en San Lázaro como en el Senado de la República, están resueltos.
En consecuencia, la aprobación de las reformas, también.
Aunque en la de Diputados la holgura es mayor, en la Cámara Alta, ya no hay de que preocuparse.
Anticipa cabildeos y adhesiones al proyecto oficial.
No da nombres, pero si habla de partidos. Pone como ejemplo al PRD, ahora extinto, quien solamente contará con dos Senadores, Jesús Zambrano y la michoacana Aracely Saucedo.
Aunque las dirigencias se desviaron, todavía hay consistencia en las bases y no dudo que encuentren mayor coincidencia con nuestro proyecto que con el resto de los partidos.
Pero no solo del PRD, habrá más compañeros Senadores y Diputados, que se puedan sumar al proyecto, anticipa.