Mínimo vital
A mi esposa, quien acaba de concluir sus estudios de posgrado. Felicidades flaca.
Esta figura: Mínimo Vital, podemos conceptualizarla como el derecho de toda persona de una sociedad a contar con una cantidad mínima para hacer frente a la más básica de sus necesidades: la alimentación.
Nuestra Constitución Política, en su artículo primero reconoce los derechos humanos de todas y todos los mexicanos consagrados en ella, así como en tratados internacionales, destacando de ellos, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que en su artículo 3 establece que “toda persona tiene derecho a la vida”.
Maravillosos buenos deseos si no se implementan acciones efectivas para hacerlos realidad. Por ello, es importante que el Estado Mexicano, salvaguarde dicho derecho humano, garantizando a todas y todos los mexicanos un ingreso mínimo mensual que cubra sus necesidades alimentarias, el cual debe estar aparejado con el precio de la canasta básica.
No soy ajeno a las críticas a esta figura; en primer término, nos encontramos con la dificultad financiera para su implementación, lo cual puede salvarse con la redistribución de programas de este corte a la fecha ya existentes, con un gasto mas austero por parte del Estado, con una ampliación de la base tributaria, con la eliminación de obras faraónicas innecesarias, con el combate a la corrupción y con la lucha contra la evasión fiscal, solo por dar algunas ideas.
Igualmente, se señala que esta figura asistencial, puede desincentivar la búsqueda de empleo y afectar a la competitividad; sin embargo, debemos señalar que algo tan mínimo, que vivir de esto es solo subsistencia, que para una mayoría hoy inserta en el mercado laboral formal o informal, no podría satisfacer sus costumbres y necesidades vigentes, pero que, para personas que hoy están en extrema pobreza significarían la dignificación de su vida, generándoles, incluso, las condiciones para buscar otros ingresos, una vez satisfechas sus necesidades primarias (alimentación).
Es importante destacar que, para su ideal implementación, esta política tiene que ser universal, para evitar fraudes a la misma y para ser realmente igualitarios. Sin importar los incentivos perversos que esta figura asistencial pueda acarrear, éticamente es más importante erradicar la pobreza extrema de una gran parte de la sociedad que hoy vive en ella en México, que la cantidad de ricos o gente sin necesidad de ella que se vean beneficiados, o la salida de la fuerza laboral de aquellos que decidan vivir solamente de este Mínimo Vital.
Respecto a esto último, es importante resaltar que infinidad de personas no harán los trámites necesarios para gozar de este beneficio, unos por flojera, otros por vergüenza, otros más, con mucho sentido ético, por autorreconocimiento de la no necesidad del apoyo.
Ahora bien, cuando hablo de universalidad, no hablo de que no deban de existir algunas restricciones o requisitos, entre los cuales de manera somera podríamos hablar de que, aquellos que no voten y no tengan su credencial actualizada se les pueda suspender, para así luchar contra el abstencionismo y construir una ciudadanía más responsable; o de suspensión por estar privados de la libertad; o suspensión durante sus residencia fuera del país; y por qué no, establecer algún cierto límite de hijos que la reciban en su minoría de edad, para evitar que se pretenda vivir de tener un hijo tras otro.
En fin, con una política pública como la que se propone, se acaba de tajo con la pobreza extrema, ya que actualmente las mediciones de pobreza extrema se basan en las personas que no pueden satisfacer sus necesidades de alimentación, creo que vale la pena su discusión, ¿o tú qué opinas?
Otrosí: Esta propuesta la hice en la Asamblea Estatal del PRI en Puruándiro, Michoacán, rumbo a los trabajos de su próxima Asamblea Nacional; espero tenga eco, porque la mejor manera de rebasar a la izquierda es por la izquierda.