Hablando en serio
“Los debates…”
Tres minutos vi el debate presidencial y cambié de canal; después, por curiosidad vi algunos post debates en dónde, cada quién, en función de sus preferencias políticas, señalaba una ganadora diferente.
Entre pena ajena y coraje me da ver al sin padre, Máynez, candidato de una entelequia con siglas MC, que tiro por viaje y pagado con mis impuestos hace el ridículo con la maquiavélica intención, opino, de quitarle votos de “jóvenes” a Xóchitl, aunque, la pura verdad, la Señora de la Gelatinas no necesita ayuda, ella solita tiene los méritos y las capacidades para mandar al traste su campaña, señalando de güeyes a todos los adultos mayores que no tienen un patrimonio, es decir, en 30 segundos, ella solita, sin ayuda de Máynez, perdió millones de votos entre viejitos pendejos, sus hijos y sus nietos, me incluyo.
Por el otro lado, el lado Moreno, la verdad pena ajena me da Claudia la Señora del bastón sin mando, a la que vía La Jornada y vía la Mañanera le dieron sus coscorrones por no envolverse en la bandera y defender a capa y espada lo indefendible, palabra del Señor.
Conclusión, todo mundo salió desanimado, excepción claro, de la Señora del INE que se gastó, es un decir, muchos millones en organizar al show que solo fue eso, un show de descalificaciones porque de debate nada tenía.
Dicho lo anterior, ¿qué sigue?, espero que no cientos de debates aburridos y anodinos entre aspirantes a Alcaldes, a Senadores y a Diputados, pero, si esa va a ser nuestra cruz, déjenme sugerir algunas cosas para no hacerlos aburridos y darles contenido:
- Respetuosamente les propongo un debate diferente a los que sugiere el librito de los expertos en campañas sucias; es decir, un debate centrado en propuestas, sumando a tod@s con visión republicana y no solo enfatizar las críticas al partido opositor o a su contrincante.
- Que entiendan los candidat@s que los ciudadanos, los empresarios y la raza en general ya estamos hartos de las guerras sucias, de los dimes y diretes y de los pleitos de lavadero, por lo que esperamos con expectación, encontrar candidat@s inteligentes y honest@s que hagan propuestas. Lo sé, no debo pedir peras al Olmo, sé que esta difícil encontrar ese tipo de polític@s, pero hay que ser optimista y tener fe, y si l@s encontramos, darles nuestro voto.
- Recordando a Martín Luther King reflexionar que: “Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos.” Es tiempo de intentarlo, la República lo requiere.
- No mentir, si se desconoce algo, se vale decir no sé, o, lo voy a investigar. Por favor, urge sustentar en la verdad la comunicación política por el bien de México, la mentira nos confronta y destruye, acaba con la confianza y con la posibilidad de cooperar todos por el interés nacional.
- Si aceptan la premisa anterior y van a hablar con verdad, por favor déjense de cifras optimistas y de promesas vacuas. No se puede bajar la edad de pensionados sin saber de dónde va a salir el dinero, tampoco ofertar obras sin la certeza presupuestal o más escuelas, hospitales y universidades sin mencionar que al gastar o invertir en ello se dejarán de hacer otras cosas. El único país que se pude dar el lujo de gastar a lo pendejo y eso con ciertos límites, es USA, que tiene la máquina de imprimir dólares sin tener realmente un costo inflacionario, cualquier otro país que lo intente pagará el costo económico con inflación y devaluaciones que traerán como resultado pobreza y en un descuido problemas sociales. Conclusión, demos por terminado el concurso y discurso de Santa Claus, dejemos de prometer lo que no podremos cumplir y seamos seri@s.
- Si van a hablar del campo, no prometan financiamientos imposibles, ni tecnificación sin costos, todo cuesta y el dinero es y será un bien escaso en tanto nos lo estemos gastando en campañas y obras faraónicas a lo idiota. Lo que sí pueden y deben prometer, es cuidar el medio ambiente y los recursos naturales, pero, si lo van a prometer, digan ¿cómo?, ya que el calentamiento global, ya presente, amenaza con sed y hambruna al planeta, México incluido.
Finalmente, sean decentes y honest@s, no les pido que sean capaces y eficientes, porque no está en su control serlo... ¡Lo que natura non da, candidatura non presta!, lo sabemos y lo estamos viendo todos los días... ¡Así de sencillo!
Un saludo y una reflexión:
Santiago Heyser Beltrán