La escasez de agua ha sido parte de su vida; así viven estos morelianos
MORELIA, Mich., 19 de marzo de 2024.- El gobierno perredista de Silvano Aureoles Conejo donó el predio en el que se asentó la colonia Leandro Valle, ya les fue instalado el drenaje, pero el agua no, situación que obliga a los vecinos a gastar hasta mil 500 pesos mensuales en pipas, servicio que cada vez falla más porque no hay agua en los puntos de abasto.
Felipe Vázquez lleva siete años habitando la colonia. Desde entonces, gasta 350 pesos semanales en agua para su vivienda, no obstante que, como otros vecinos, ha aprendido sin querer a reutilizar el agua y eficientar su uso.
“Ya llevó siete años aquí, todo lo resolvemos con las pipas; llenamos en tambos y un aljibe que hice, porque no tenemos el servicio de agua potable. El precio depende, pero yo compro la de 350 pesos y me dura una semana”, declaró el también padre de familia.
Pero no todos tienen aljibe, algunos sólo tienen tinacos y botes de acero de entre 100 y 300 litros y tinas de plástico, y pese al reto que significa gastar tanto en agua, vivir en estos predios es la única solución a su problema de vivienda.
Lilia Ávila, adulta mayor, es michoacana que muy joven emigró a Ciudad de México; su vida la hizo en la capital del país, pero no tuvo acceso a la vivienda, lo mismo que otros vecinos de la ampliación Leandro Valle, albañiles, pintores y carpinteros que no cuentan con las prestaciones de ley.
Martha Reyes, vecina del asentamiento, lleva años sufriendo el problema del agua, porque antes de llegar a la Leandro Valle vivieron en otra colonia donde había poca agua, en Villa Magna, fraccionamiento donde el pozo producía en 2017 1.78 litros por segundo, de acuerdo a información pública del OOAPAS.
La escasez de agua ha sido parte de su vida, Martha recuerda que la única vez que no le hizo falta es cuando vivía con sus padres.
“Casi siempre he estado sin agua, solamente cuando vivía con mis papás en la López Mateos, allí nunca falta; porque me fui de allí a una casa que me prestaron en Villa Magna y también falta mucho el agua”, declaró ante las cámaras de Quadratín.
Martha, como otros vecinos, depende del abasto del agua con pipas, porque si bien a unos metros está un pozo de agua, este es únicamente para el servicio del estadio Morelos, pero las pipas han comenzado a tener problemas para llevar el agua a ese y otros asentamientos, porque los pozos de los que se alimentan han comenzado a tener problemas de rendimiento.
Ángel Sandoval, de oficio pipero, como se le conoce coloquialmente, y vecino de la Leandro Valle, declaró en entrevista telefónica que actualmente viven una crisis.
“No sabemos qué está pasando, porque no hay agua y en otros no nos dejan cargar; por ejemplo, hay días en que llegamos a formarnos a las 11 de la mañana y salimos a las 6 de la tarde. No podemos abastecerlos porque no hay líquido”, declaró.
Expresó que los pozos a los que acude son el de Parián y los disponibles en Torreón Nuevo, donde ya han reducido notoriamente su producción de litros por segundo, y en la Mintzita ya no los dejan llenar las cisternas.
“Las personas están desesperadas, piensan que uno no les quiere llevar, pero no hay; nosotros les llevamos agua a personas que viven en los cerros como El Resplandor, a donde no llega nada”, añadió.
Este problema ha escalado a tal punto que vecinos de fraccionamientos como Villas del Sur han pagado hasta en 400 pesos un tinaco de mil 500 litros, eso en el pasado diciembre, dejando con ello un antecedente claro: el agua será para quienes puedan pagarla.
Para quienes no tienen recursos propios para pagarla, al costo que sea, el Ayuntamiento de Morelia ofrece un servicio de pipas para colonias populares con problemas de abasto de agua, actualmente son 25 pipas con las que cuenta de entre 10 y 20 mil litros, dio a conocer el secretario del Bien Común y Política Social, Adolfo Torres Ramírez, pero para ello hay que hacer la solicitud al municipio, presentar documentos como el INE y comprobantes de domicilio, así como esperar a que esté disponible una pipa.
Los vecinos de la ampliación Leandro Valle y otros asentamientos iguales han aprendido aprovechar el agua, darle uso en el jardín y el baño, ese será el reto para quienes siempre han tenido agua potable directo en su vivienda, porque esta escasez pondrá a prueba a todos los morelianos, ¿qué harán, bañarse o trapear, lavar el carro o la ropa, limpiar la mesa o los trastes?