El Plan Morelos y la consolidación del Bedollismo como corriente política
MORELIA, Mich., 20 de agosto de 2021.-El lanzamiento del Plan Morelos, también fue un mensaje de confirmación:
Ya existe el Bedollismo, no solo como una expresión alusiva al que gobierna, sino a la conformación de un grupo político, de un clan con identidad propia, de una corriente política, por hoy, la más solida e influyente en Morena y Michoacán.
Alfredo Ramírez ha construido en torno a él, un nuevo relevo generacional, cuyos integrantes promedian menos de 50 años.
Ante más de 50 mil asistentes, Ramírez Bedolla se asumió como cabeza de una nueva clase política.
"Nos asumimos como parte de una generación que no lucha por cargos públicos o por amansar fortunas y mantener el poder. Somos una generación que entiende que nuestra trascendencia está en la defensa de nuestros derechos, de nuestra patria y de lo alcanzado en la cuarta transformación".
Carlos Torres Piña, Luis Navarro, Gabriela Molina, Guiliana Bugarini, Gladiz Butanda, Tamara Sosa, Carolina, Záyin Villavicencio, Rogelio Zarazua, Roberto Monroy, ahí están.
En la revisión, no hay registro de que algún gobierno haya osado abrir una convocatoria de tal envergadura, una propuesta de reforma al constituyente y una movilización tan contundente.
Solo el evento del Papa Francisco, allá por el 2016, se equiparó a la movilización de hoy.
El Plan Morelos tuvo como telón de fondo, la demostración de que hay un gobernador fuerte, con capacidad de convocatoria para la movilización, algo de suma utilidad para los retos electorales por venir.
Es el telón para acallar las voces que so pretexto del piso parejo, tocan puertas federales, una y otra, desde Bucareli hasta la sede de la SSPyPC, las puertas del CEN del partido.
Acusan la ingobernabilidad, grillan y se quejan de que en Michoacán hay un gobierno que va contra todo principio cuatroteista.
Enarbolan el postulado del Presidente, ahí se esconden y justifican, mientras afilan cuchillo para atacar al Ejecutivo y sangrar a Morena.
Lo de hoy, fue un portazo en seco y evidenció que Ramírez Bedolla es quien mantiene el poder y el liderazgo político, dentro y fuera de Morena.
Planificado con meses y anunciado hace 10 días, el evento del Plan Morelos permitió al mandatario perfilarse como un Gobernador sólido, fuerte.
Ese era el otro mensaje.
Ramirez Bedolla ancló parte del discurso en el apoyo total y pleno al Presidente López Obrador.
Le mandó el mensaje de que en Michoacán le son leales.
Dio matices de que él sí es un auténtico obradorista, forjado en las crisis del desafuero y del fraude electoral del 2005 y 2012.
"No soy burócrata ni de escritorio, mi origen proviene del movimiento", recordó a los seguidores.
Reconoció en el tabasqueño la tenacidad y perseverancia para llevar al país a un cambio democrático pacífico e iniciar una ruta transformadora en bien de los pobres.
Lo de hoy, es el inicio de una ruta de fortalecimiento del proyecto y la continuidad del mismo hasta el 2034.
Eso es lo que se vio.