Da el torero Isaac Fonseca la nota destacada en Huesca

MORELIA, Mich., 10 de agosto de 2023.- En Huesca, la nota destacada la dio Isaac Fonseca, ante toros desrazados de los Maños. El torero mexicano aportó valor, templanza y arte ante su lote, lo menos malo del encierro, conectó con el público, logró emocionar con su toreo verdad, su entrega sin límites y ese su pararse constantemente donde huele a cloroformo; de suyo, fue derribado por el tercero, al golpearlo con una pata y, luego, el mismo burel lo empaletó de fea manera y le dio una vuelta de campana, afortunadamente sin consecuencias lamentables.
Isaac Fonseca les hizo faena a los dos que le mandaron.

A su primero le dio saludo capotero con verónicas, una media y chicuelinas muy ajustadas; la faena de muleta la empezó en el centro del ruedo con dos cambiados por la espalda, tan apretados que no cabía un pelo entre su humanidad y los pitones. El moreliano lució con derechazos largos, lentos y templados que le fueron celebrados por la blanca multitud. Lamentablemente perdió con el acero el triunfo. Ovación.

El cierra plaza fue el mejor del encierro. Isaac Fonseca lo entendió, lo consintió y lo supo llevar sin forzarlo, sin apresuramientos y con el aire suficiente para que no rodara. El tercer tercio lo abrió de rodillas con cambiados eléctricos que provocaron el olé en los tendidos, variada fue la faena del Huracán de Morelia, sentida y emotiva.

Cuando tomó la toledana se hizo el silencio, la expectación y el deseo de que la metiera hasta los gavilanes, pero el de Los Maños no empujó y… pinchazos que provocaron que se le fuera el triunfo grande. Aplausos.

FERRERA

Antonio Ferrera dejó ver su experiencia, como que es un torero tiempista que sabe cuándo y cómo, mas como le tocó un lote infumable abrevió con pinchazo y estocada. El cuarto fue el peor de lo peor de Los Maños, y aunque el extremeño quiso agradar, nada pudo hacer, de suyo el toro se echó y no hubo poder humano que lo hiciera levantarse. El juez ordenó que se le apuntillara, lo que se hizo para vergüenza del ganadero, digo, si la tiene.

GARRIDO

José Garrido tampoco tuvo buena fortuna con su lote. Sin embardo, el ibérico logró dos verónicas de antología ante su primero y, después, ay después, como que el diestro no supo qué hacer, no quiso o no pudo, lo que ni siquiera se le cuestiona porque no había mucho qué hacer ante tan descastados animales. Falló con el acero y… silencio. Ante el quinto no cambió la historia, falló con el metal y, otra vez, silencio sepulcral.

PÉSIMOS

La presentación de la ganadería de Los Maños había provocado gran expectación. Se esperaba su triunfo, sin embargo, fue una decepción mayúscula. Si en los reglamentos taurinos existiera la figura del fraude ganadero, este sería uno de ellos, por lo infumable del encierro que mandó. Así sea.