Proyecto secreto
CRISIS POLÍTICA MUY PREOCUPANTE
México es una partidocracia clásica, la clase política es la causa del caos, desastre, dolor que padecemos.
Vista panorámica
Cuantas veces esperamos que los políticos busquen el bien de México con autenticidad y verdad. Esperamos en vano. Se nos olvida que muchos políticos, en el discurso que busca el voto de la
gente van por un lado y las verdaderas intenciones van por otro. Ha sido una política de ficción a la que de alguna manera nos hemos acostumbrado “sin querer queriendo”.
No es una sorpresa y si una tristeza enterarse de que todos los partidos políticos más importantes adolecen de individualismo y mezquindad, son mercenarios, buscadores de oro y de placer. en el
fondo, el sentir del pueblo va en esa línea. El desprestigio de la política ante la gente es un hecho. Los ciudadanos lo sienten pero no lo enfrentan seriamente, con el compromiso que este problema vital
debe implicar.
Se van tras las cuentas de vidrio de sus pequeños bienes materiales, mezquinos: puestos de poder, fama, dinero. No trascienden, no se elevan a las grandes causas para toda la nación.
Son incapaces de sueños de una patria verdaderamente ideal, de la liberación de la postración y el sufrimiento de las clases humildes, de la felicidad para las multitudes no sólo para la clase política. La
grandeza de México no entra en sus categorías existenciales.
finalmente todo es simulación, astucia perversa, enanismo espiritual y conductas y estrategias viles para buscar bienes particulares y banales.
Es lamentable y escandalosa la poca preparación de muchos funcionarios públicos, elegidos para las grandes tareas de la patria: los conceptos tan huecos y pobres, la falta de formación académica y
moral que aparecen en sus actitudes y pronunciamientos, en expresiones vergonzosas que vemos en los debates del Congreso, en las declaraciones oficiales. ¿Cómo un pueblo culto y sabio como la nación mexicana puede tolerar esa conducta grosera y escandalosa?
México se desangra, muchos hermanos son asesinados, estamos en una tierra sin ley. Los criminales matan, son demasiados asesinatos y balaceras, es el Estado fallido, ¿dónde está la Guardia Nacional y las policías y la autoridad? Es desconcertante, indignante, aberrante.
Andrés Manuel es el primer servidor de la patria, el mandatario. El soberano, en democracia, es el pueblo, el ciudadano .
Andrés Manuel no es el gran patrón, el dueño, el señor de todo. No cabe su actitud de disponer de todo, por su capricho.
El autoritarismo con que dispone de todo, el absolutismo y la prepotencia, la necedad por encima de todos no es propio de un presidente, son rasgos de un dictador que se siente dueño de la República y dispone de todo a su antojo.
Olvida que en una democracia auténtica, el soberano es el pueblo y el centro de la vida nacional y de la gestión, es la persona humana, el ciudadano a quien todos deben servir buscando el bien común para que cada mexicano realice el destino grandioso y eterno que le fijó el Creador porque lo hizo a su imagen y semejanza, como soberano de la creación
Con prepotencia se imponen las decisiones, sin consenso. En las justificaciones se da “atole con el dedo”, se impone el punto de vista oficial, con falacias, con engaño astuto, con apariencias de verdad y de buenas intenciones.. Es la imposición prepotente que deja indignación larvada.
La luz de Dios
Debemos caer en la cuenta de que la situación es caótica, desastrosa, grave y generalizada. Es la descomposición social, el derrumbarse del progreso, la producción, la economía…
Es la emergencia en todas las dimensiones de la existencia: la educación, la calidad de vida y la atención a la salud, amagos de una dictadura, golpes a la democracia, desamparo de los inocentes que mueren sin protección, una narrativa ideologizada, atentados contra la Constitución y la democracia porque no se respeta la división de poderes ni se asumen las conquistas democráticas de México ni se vela por el bien común sino por los sueños de un solo individuo adicto al poder y al bien de sus hordas aglutinadas en un
Movimiento. Estamos en un sueño absurdo o en una pesadilla.
Resuena con ecos hondos y dramáticos la voz poderosa y tremenda del Mesías, el más grande guía de multitudes de la historia:
“pero esta es la hora de ustedes y el poder de las tinieblas”.
Es urgente que todos los mexicanos demócratas defendamos las conquistas democráticas contra actitudes dictatoriales. Es necesario expresarse y defender la democracia.
Los poderosos de la clase dirigente se sienten por encima de la verdad, pisan, mancillan, pisotean y profanan la verdad, la Roca, sobre la que descansa el orden social.
Hay quien se cree grande como un dios falso y cree que es dueño de la verdad, que está sobre este valor, que el mismo crea la verdad sobre lo que vale una persona y sobre la realidad de los hechos. Se ubica por encima de la verdad. Dice tener “otros datos” que existen sólo en su cabecita. En realidad, se mueve en un mundo inexistente, producto de una mente febril. Es la enajenación, la flotación en la irrealidad, sin contacto con el mundo concreto. Es un mundo de mentira donde se enajena la clase dirigente. En ese
mundo no se produce el fentanilo en México ni hay espacios controlados por el narco… Estamos en un mundo ideal.
Es necesario, poner los dos pies en la tierra tierra para hacer frente la realidad política y social y detener la carrera alocada de México al desastre y el infierno.