El conciliador
Desde que trascendió la determinación que tomó el presidente López Obrador, en torno a la designación colectiva que decidió la mayoría del pleno en la Cámara Alta, siguen surgiendo especulaciones después del veto presidencial que hizo el mandatario a los consejeros del Inai. Lo cierto es que, más allá de cualquier hipótesis, es un tema que está superado y rebasado porque Ricardo Monreal es un férreo defensor de las normas y de la constitución.
Lo mejor hubiera sido haber respetado la decisión colectiva que hizo el Senado de la República, sin embargo, el recurso que utilizó el presidente López Obrador tiene facultades constitucionales para refutar. En ese sentido, el coordinador de los senadores de Morena lo tomó con responsabilidad y adoptó una posición muy seria para seguir adelante y sacar, dentro del periodo restante, la encomienda que está pendiente para completar a los siete consejeros que necesita el Inai para poder sesionar y operar.
De ese modo, muchos buscan minar la intriga de un trasfondo político que no existe pues el senador Ricardo Monreal ha salido adelante de otros retos que han constituido un enorme desafío. Recuerdo que, la reforma militar, es un buen ejemplo para entender el potencial que tiene la mediación que imprime el zacatecano para alcanzar acuerdos con las distintas fuerzas políticas. De hecho, ese tema en particular, estuvo envuelto por una rígida fricción entre los partidos que integran el pleno; parecía perdido, sin embargo, Monreal sacó a flote su capacidad y logró lo que aparentaba imposible.
La Reforma Militar se aprobó con la mayoría calificada, es decir, dos terceras partes del pleno votaron a favor. Y como se trató de un tema de mayor interés para el presidente López Obrador, se reconoció el oficio político del Ricardo Monreal que, con su estilo y vocación, abrió la puerta, incluso logró que una parte de la oposición coincidiera en ese asunto pues el hecho de que alguien lleve a acabo ese curso con una influencia positiva, merece el reconocimiento y respeto de todos los sectores de la población civil.
Se trata, no tengo duda, de uno de los políticos más completos de nuestro país. Es decir, aquel que cuenta con las características indispensables para llevar a buen puerto cualquier propuesta. De hecho, la inmensa mayoría de la población vemos a Monreal como un hombre que actúa con plena libertad y autonomía en sus decisiones.
En otras palabras, es un conciliador nato que ha dedicado el mayor tiempo de su carrera política a ser grandes aportaciones a las políticas públicas del país. No se diga desde el legislativo federal donde se ha hecho presente, de manera eficaz, en todas las propuestas presidenciales traducidas en Reformas Constitucionales.
Hoy, el destino político lo vuelve a colocar en otro desafío que, seguramente, sacará con oficio y capacidad. Con esa premisa, él mismo comentó que ha comenzado las pláticas con las distintas fuerzas políticas que integran el pleno para el tópico pendiente de los nombramientos del Inai . En ese sentido, no hay duda que pondrá todo su esfuerzo para que el asunto se resuelva antes del 1° de abril. Empero, adelantó que de eso depende alcanzar consensos dada la polarización que se vive en torno a la sucesión presidencial.
Desde luego que esa situación ha permeado hacia al interior de las decisiones que se toman en todos los sentidos. Ese no es, para nada, el caso de Ricardo Monreal pues su responsabilidad legislativa es muy estricta en cuanto al trabajo que encabeza no solo como coordinador de la fracción mayoritaria, sino como presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado cosa que, Monreal, hace todos los días.
Y el asunto que hay en puerta no será la excepción. No obstante, el presidente Obrador puede utilizar nuevamente su recurso constitucional de refutar la designación. La cuestión es que, el Senado de la República, no quedará como el responsable de la parálisis del Inai, especialmente porque Monreal descartó que se vaya a realizar un período extraordinario para la selección de los comisionados del INAI.
Por esa razón el senador Ricardo Monreal, fiel a su estilo, ha planteado diálogo y conciliación para nombrar a los comisionados pendientes, incluso busca que la mayoría simple avale la propuesta dado que, el zacatecano, ha usado esos mecanismos de interlocución que tanto resultado le han dado en la agenda legislativa donde se ha convertido, en cuatro años de labor, en el arquitecto de las Reformas Constitucionales, al grado de recibir el reconocimiento de todos los sectores de la población civil.
Es por ello que Monreal se ha convertido en un líder con suficientes atributos y capacidades para convertirse en el sucesor del presidente López Obrador en 2024.