Disfraces de la Primavera: 800 pesos por un día y la foto
MORELIA, Mich., 16 de marzo de 2023.- Se acerca el Día de la Primavera y los padres de familia han comenzado a ahorrar para los disfraces de las bendis, inversión que puede llegar hasta los 800 pesos y durar tan poco como el mismo festival escolar, quedando solo para la posteridad una fotografía.
Porque en México año con año, especialmente en los preescolares, se acostumbra que para celebrar el solsticio los niños salgan a las calles enfundados en apretados disfraces de abejas, orangutanes o flores, saludando desde coloridos carros alegóricos, soportando las elevadas temperaturas y los mensajes repetitivos de “saluda, Juanito”, “mira a la cámara, Luisito”—mientras las madres de familia se las ingenian para lograr una fotografía con su celular—.
Para ello, padres de familia de Morelia encuestados por Quadratín reconocieron que no esperan gastar poco, por el contrario, el gasto puede ser elevado, mientras que otros han corrido ya con la suerte de encontrar empatía con sus amistades y les van a prestar el disfraz.
“Mi hija escogió de conejo, calculo que no serán menos de 500 pesos; el último disfraz que le compré costó 450 y ahorita como están los precios, no espero menos”, declaró Dulce, madre de familia de dos pequeños y quien reconoció que de no saber de niños que lo necesiten, se van a quedar en el closet.
Por su parte, Julio no solo tendrá que aportar para el famoso carrito alegórico, también tiene que vestir a dos pequeños de abejorro.
“No sé cuánto vaya a gastar, los voy a disfrazar de abejorro, después, los vendo o reutilizo”, explicó.
Marco Antonio, padre de familia, también está consciente del gasto que se viene, pero cuenta con el apoyo de su pareja, que también trabaja y aporta, además de organizar la logística de traslado de los niños y participación de ambos.
“Creo que se van a vestir de abejitas. A su mamá le toca organizar y entre los dos pagamos, y los disfraces se van quedando, ya no sirven. Es inversión que se pierde”, manifestó Marco Antonio.
Y mientras otros van a gastar, Blanca celebró que no tendrá que gastar, porque “me lo van a prestar, uno de conejo”.
Porque después de dos años de estar en línea y no estar obligados a adquirir estos materiales, este año vuelven los gastos oficiales, de disfraces, pero también de los uniformes y otros ordinarios.
A diferencia de otros países, como Estados Unidos y Canadá, donde es recurrente el uso de los disfraces, popularizados por la agenda que marca el cine de superhéroes o de terror hollywoodense, en México la industria todavía es hogareña, en pequeños talleres familiares y algunas empresas dedicadas principalmente a la producción de uniformes escolares, que diversifican sus productos en primavera, el mes patrio y noviembre.