Rubén Rocha pone el ejemplo/Javier Lozano Gamiño
Fue un fin de semana intenso para las corcholatas oficiales de Morena que buscan, una vez que se lance la convocatoria, participar en el ejercicio interno para suceder al presidente López Obrador en el proceso de transición que viviremos en 2024. En ese sentido, el coordinador de los senadores hizo presencia en algunos estados del norte para atender temas ligados al desarrollo legislativo. Mientras eso pasó, hubo una manifestación o gesto muy cortés de parte del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, que demostró flexibilidad para abrir tribuna a Ricardo Monreal.
Ambos personajes son muy cercanos; los dos fortalecieron esa relación de amistad en el Senado de la República, incluso, Ricardo Monreal apoyó abiertamente al ahora gobernador de Sinaloa en el proceso interno de Morena. Eso consolidó los puentes creando más canales de comunicación del mismo modo que, para efectos de cortesía, quedó muy claro el trato de respeto desde que el coordinador de los senadores de Morena llegó para acompañar un informe legislativo.
Y, con mucha flexibilidad, Rubén Rocha le brindó todas las disposiciones. Cumplió, en ese sentido, con la instrucción presidencial a través de la misiva que envió Mario Delgado a los gobernadores de las entidades emanadas de Morena. Si esta apertura sigue así, muy pronto las condiciones políticas se podrán equilibrar. Fue un paso importante, sin embargo, queda mucho camino para que el proceso encuentre un punto clave que ponga fin a la segregación.
Es verdad que a Ricardo Monreal le levantaron el veto. El presidente Obrador decidió meterlo a la lista de aspirantes oficiales de Morena; no obstante, es cuestión de que se ponga en práctica esa voluntad. En definitiva, hablaremos de pluralidad y democracia cuando todos los gobernadores y gobernadoras- emanados de Morena- sigan el ejemplo de Rubén Rocha en Sinaloa. Esto es, en términos políticos, que a las cuatro corcholatas se les abran los mismos espacios, foros de participación, ponencias, debates y sobre todo respeto.
La mejor forma de ponerlo en práctica es la invitación a cada una de sus entidades federativas. Algo similar a lo que pasó en Sinaloa donde Ricardo Monreal habló con toda libertad de temas de interés social. Incluso, el gobernador de la entidad del norte aprovechó para manifestar el reconocimiento a la trayectoria del zacatecano en la ceremonia o marco que fue testigo de un informe legislativo. Sabe que, en ese sentido, el coordinador de los senadores de Morena es uno de los aspirantes más fuertes al interior del movimiento.
No sólo lo apapachó, sino vitoreó su labor. Podría decirse que, en el ánimo del gobernador de Sinaloa, está muy presente Ricardo Monreal. Sin duda alguna, fue un buen gesto de Rubén Rocha y es, en ese sentido, una coyuntura que esperamos atestiguar en los estados donde gobierna Morena. Si esa es la tónica de este proceso, solo falta que pongan fin al esquema de publicidad y propaganda que otras corcholatas han puesto en marcha. Ojalá que sea pronto porque hay una dispersión de anuncios y espectaculares que está violando el marco constitucional.
Sería muy bueno que, en ese sentido, hubiera una tregua entre los cuatro aspirantes oficiales. Es decir, un pacto de civilidad donde se fijen reglas de participación equilibradas y democráticas para que nadie saque provecho. Aunque la carta tenga una clara instrucción, falta, como lo dijimos, ser testigos de que habrá democracia para contribuir al anhelado piso parejo.
Y el gobernador de Sinaloa captó perfectamente el mensaje y sabe que, en esa baraja de presidenciales, está su amigo Ricardo Monreal con el que caminó el fin de semana en tierras del norte del país.
A propósito de la intensidad de trabajo legislativo que tiene Ricardo Monreal, se prevé que esta semana las comisiones unidas de Gobernación y de Estudios Legislativos Segunda, se reúnan para analizar y dictaminar la reforma en materia electoral.
En entrevista, refirió que, aun cuando se tarde una semana la discusión de la reforma, no se va a evitar que se interpongan los recursos de inconstitucionalidad a los que se tienen derecho, ya que la Constitución y la ley lo previenen.
Indicó que una vez que las y los integrantes de las comisiones dictaminadoras deliberen y voten el documento, se procederá a enviarlas al Pleno para que ahí se defina lo correspondiente.
“Nunca le hemos dado vía rápida o fast track, las comisiones no actúan así”, expresó.
Monreal Ávila recordó que la oposición ya presentó algunas acciones de inconstitucionalidad contra las dos primeras leyes, “las dos están impugnadas ante la Corte”.
Finalmente, expresó que los ministros de la Suprema Corte tienen el tiempo suficiente para analizar, deliberar y resolver sobre esta materia tan importante.
Respecto al discurso que realizó la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, en el aniversario de la Constitución Política que se llevó a cabo en Querétaro, dijo que respeta lo que dijo, “siempre he sido tolerante”.
Expresó que es un fiel seguidor, observador y simpatizante de la división de Poderes, porque es conveniente que en nuestro país existan los contrapesos, “de tal suerte que no existan excesos de ninguno de los poderes, sino que actuemos todos en razón de nuestra responsabilidad constitucional”.
En ese sentido, señaló que la cortesía política nunca sobra, siempre ayuda y el que se asuma una posición de diplomacia no compromete la división de poderes ni la autonomía.
“Nunca hay que perder la cortesía política, ni la diplomacia, aun cuando tengamos diferencias, pues junto con ella, la tolerancia, la verdad, la conciliación, el respeto, son valores de la democracia y de las sociedades modernas”.