Aplauden empresarias definición de los límites entre Jiquilpan y Sahuayo
JIQUILPAN, Mich., 2 de febrero de 2023.- Como un acto de elemental justicia, calificó Adriana Novoa, empresaria Jiquilpense y miembro de la organización Mujeres Unidas por Jiquilpan, la delimitación con Sahuayo en favor de Jiquilpan, asunto que fue tratado en la comisión respectiva el pasado 30 de enero en el Congreso del Estado “pues en los hechos los habitantes de las colonias del tramo en definición realizan todas sus actividades legales y de contribución en el municipio de Jiquilpan, como demostraron en esta reunión y con los documentos respectivos los funcionarios municipales y el presidente Elías Barjas”.
Mujeres unidas por Jiquilpan, ha estado acompañando el tema de límites desde hace años y cuentan con diversas demandas ante las instancias correspondientes y ahora consideran que es posible resolver este añejo tema que solo en términos presupuestales significa que Jiquilpan deje de recibir unos 12 millones de pesos, “estas colonias, pagan predial, agua, sus trámites de escrituras y actas de nacimiento etc., todo lo hacen en el municipio, así que de facto son parte de nuestro municipio; ahora solo esperamos que la actuación de los diputados miembros de la comisión respectiva actúen en consecuencia”.
Más aún, Alfredo Ramírez Bedolla gobernador del estado, tiene muy claro el tema, pues siendo presidente de la junta de coordinación política de la LXXIV legislatura lo conoció y turno a la comisión respectiva de ese entonces.
De acuerdo a Adriana Novoa quien estuvo presente junto a otros Jiquilpenses especialistas en el asunto el pasado 30 de enero; “Abordamos a algunos diputados de la comisión una vez terminada la reunión a la que solo entraron las autoridades de los municipios. Les hicimos saber que solo es un asunto de justicia y no del ámbito político, -si usted encuentra un reloj que es mío y del cual yo tengo la factura y se la presento; ¿De quién es el reloj, usted solo tiene su dicho y yo los documentos que avalan mi propiedad del reloj?, la respuesta fue: no me presione porque le voto en contra y le contestamos -pues aquí tendrá al pueblo de Jiquilpan exigiendo respuestas por su actuación, nos asiste la razón”.
En un artículo del año 2013, el investigador del Colegio de Michoacán Philippe Schaffhauser Mizzi titulado “Las distancias de la cercanía. Una aproximación a la rivalidad regional entre Sahuayo y Jiquilpan, Michoacán”, señala en el resumen del texto: “Este artículo versa sobre el tema de la construcción de estereotipos culturales a través de uno de sus múltiples alicientes etnocéntricos, la rivalidad regional. Si bien, el fundamento de esta relación antagónica entre localidades vecinas puede derivar de un conflicto originario (el cual en el caso que nos ocupa se relaciona, sin duda, con el auge del cardenismo que convirtió a Jiquilpan en un centro político nacional), su actualidad a los ojos de los habitantes de ambos municipios cobra la forma de un chauvinismo exacerbado donde por un lado Jiquilpan aparece de manera esquemática como un municipio heredero de una cultura política de rancio abolengo que ha dado pie a un reconocimiento nacional y donde, por otro, Sahuayo combina su vocación comercial con su triple arraigo religioso sefardí, católico y cristero. Este contraste corresponde a una sobrerrepresentación que construye una brecha imaginaria entre los dos municipios ocultando la relación de cercanía y complementariedad que no ha dejado de existir entre ambos. En este sentido, las identidades locales se nutren de esta aparente distancia que corresponde a lo que Freud ya había señalado (1978, 55-56) como expresión de un "narcisismo de las pequeñas diferencias" o lo que Moisés Sáenz (1939, 113) describió como expresión de la fragmentación nacional donde cada comunidad, localidad y pueblo del país se convierte en una "patria chica" para sus habitantes. Bajo un enfoque constructivista, este artículo examina la construcción de algunos artificios identitarios cuyo propósito social no es tanto identificar lo propio en cada municipio, sino crear de facto una distancia entre ambos, tan artificial como inconmensurable, a través de la incorporación rutinaria en las prácticas sociales de representaciones sociales sobre el otro en tanto que "no jiquilpense" o "no sahuayense".